El caso frío del asesinato de Judith Lord en New Hampshire ha sido resuelto tras medio siglo, identificando al autor como Ernest Gable, el sospechoso original cuyo procesamiento fue frustrado por un informe forense defectuoso del FBI.
Judith Lord, de 22 años, fue encontrada muerta en su apartamento de Concord el 20 de mayo de 1975, pocos meses después de mudarse, según informó el fiscal general John M. Formella.
Un administrador del edificio descubrió a Lord sin vida en una cama del piso superior mientras buscaba el alquiler impago. El hijo de Lord, de 20 meses, fue encontrado vivo e ileso en una cuna en una habitación adyacente.
La víctima murió por estrangulamiento homicida, según la autopsia. La evidencia en la habitación desordenada apuntaba a una lucha violenta y agresión sexual, con pelos encontrados en el cuerpo y la cama de Lord, mientras se halló fluido seminal endurecido sobre una toalla aún húmeda.
Los investigadores identificaron como sospechoso al vecino Ernest Theodore Gable, de 24 años en ese momento. El caso fue severamente obstaculizado por un informe forense defectuoso emitido por el FBI en 1975, dijo Formella.
En ese momento, las técnicas de análisis microscópico de cabello llevaron a una conclusión incorrecta de que Gable no podría haber contribuido con los cabellos encontrados en la escena.
Otra evidencia contradijo los resultados del análisis, con huellas dactilares de Gable encontradas en la escena y testigos que revelaron que Lord le tenía miedo.
Durante la investigación, los detectives descubrieron que Lord había estado asustada tanto de su esposo como de Gable debido a sus insistentes y no deseados avances.
Judith le dijo a su hermana que temía tanto a su esposo como a su vecino afroamericano de al lado, refiriéndose al Sr. Gable, porque le había hecho comentarios sobre querer verla desnuda, encontró el informe.
Lord se había mudado al complejo Concord Gardens con su esposo, Gregory, y su hijo tres meses antes, después de regresar de Alemania, donde Gregory había estado destinado.
La pareja vivió junta hasta que Lord fue agredida por su esposo el 4 de mayo de 1975, 16 días antes de su asesinato. Gregory Lord fue arrestado y declarado culpable de agresión simple, siendo multado con 100 dólares.
Se mudó del apartamento compartido, reubicándose en la casa de su abuela al otro lado de la calle, llevándose todo excepto a Lord, su hijo, una cama y una cuna.
Gregory Lord fue inicialmente el principal sospechoso, pero fue exonerado después de que su hermano y abuela corroboraran su coartada.
Lord renunció a su trabajo en un hogar de ancianos cercano después de la agresión. Cobró su cheque de pago final el día antes de su muerte y regresó al complejo para pasar el rato con vecinos.
Regresó a casa justo antes de la medianoche. La esposa de Gable dijo a la policía que escuchó a Lord en la ducha minutos después.
Alrededor de las 12:50 a.m., vecinos reportaron escuchar gritos desde el apartamento de Lord antes de sonidos de gemidos, que se creían por relaciones sexuales, a través de las paredes.
Después del asesinato, varios testigos revelaron las perturbadoras interacciones de Lord con Gable, incluso cuando llamó a su puerta a las 2 a.m. mientras su esposa estaba fuera de la ciudad, preguntándole si quería festejar con él.
Una compañera de trabajo recordó específicamente que la Sra. Lord decía que este hombre siempre la molestaba y merodeaba por sus puertas y ventanas, detalló el informe.
Gable nunca fue acusado del asesinato. Fue apuñalado mortalmente casi 13 años después, el 1 de febrero de 1987, en Los Ángeles, California.
Si estuviera vivo hoy, Gable habría sido acusado de Asesinato en Primer Grado, tanto por causar conscientemente la muerte de Lord durante la comisión de agresión sexual feloniosa agravada, como por causar intencionalmente su muerte por estrangulamiento, dijo Formella.
“Espero que esta conclusión tan esperada finalmente traiga paz y cierre a la familia de Judy Lord y a toda la comunidad de Concord después de casi cinco décadas de justicia retrasada”, dijo Formella. “Esta resolución prueba que ningún caso frío está realmente cerrado hasta que se encuentra la verdad”.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**