El jugador colombiano Guillermo Denis Beltrán falleció de un paro respiratorio tras desvanecerse en la cancha durante un entrenamiento de su club, el Real Santa Cruz de la primera división del fútbol boliviano.
El colombiano de 24 años habría sufrido una descompensación, recibió atención y fue trasladado para recibir atención médica, pero falleció tras un paro respiratorio severo.
“Estaba entrenando con normalidad y se desplomó. Se buscó reanimarlo, pero murió cuando era trasladado a una clínica”, dijo el dirigente Adolfo Soria Galvarro.
Beltrán se formó en las divisiones menores de Atlético Nacional y en Colombia integró también el plantel de Leones, en la B. De allí partió a Paraguay, donde actuó en primera división con Tacuary y Rubio Ñu y fue goleador en el ascenso con Colegiales en 2022. Llegó a Bolivia el año pasado.
Según testimonios de sus compañeros, Beltrán sintió mareos y se desplomó en pleno entrenamiento. Los médicos del club intentaron reanimarlo, pero como no reaccionaba llamaron a una ambulancia. Murió camino a una clínica en la ciudad de Santa Cruz, en el oriente boliviano, añadieron.
Acolfutpro denunció mala atención
Tras la muerte de Denis, la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales (Acolfutpro) denunció que hubo negligencia y que el fallecimiento se pudo evitar.
Acolfutpro aseguró que en la atención al jugador no se evidenció que hubiera un médico en el entrenamiento y que tampoco había un desfibrilador, a pesar de que la Federación Boliviana de Fútbol dotó al club de este aparato y de otros equipos de primeros auxilios.
Además, increíblemente, el jugador fue trasladado en un automóvil particular y no en una ambulancia a la Clínica Melendres, que quedaba alejada del sitio de prácticas del equipo, y quien intentó reanimarlo fue una funcionaria de mercadeo del club.
La denuncia de la agremación se basa en una recopilación de los hechos que llevaron a la muerte de Denis hecha por el periodista boliviano Fernando Nürnberg, quien, además, exigió que el Real Santa Cruz muestre el informe de la revisión médica que se le hizo al jugador.
En las averiguaciones para repatriar el cuerpo de Denis, Acolfutpro descubrió que al futbolista le debían tres meses de salario y que estaba pasando dificultades en ese país.
“No hay derecho a que los futbolistas en Bolivia pasen por esto y la Conmebol y la Fifa no hagan nada. La mayoría de clubes no pagan. Año tras año acumulan cuatro, cinco, seis meses y siguen como si nada”, dijo el director ejecutivo de Acolfutpro, Carlos González Puche.
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