
Los últimos enfrentamientos registrados en la frontera entra Tailandia y Camboya han dejado al menos diez muertos y decenas de heridos en ambos países, que han constatado un aumento de la violencia después de que las fuerzas tailandesas atacaran durante el fin de semana posiciones camboyanas tras denunciar la muerte de uno de sus soldados a manos de las tropas del país vecino.

El Ejército de Tailandia, que ha situado en casi una treintena los heridos, ha indicado que otros dos militares han fallecido en la provincia camboyana de Preah Vihear, donde han sido alcanzados por el fuego de artillería. Así, ha señalado que los fallecidos son Wayu Kwansue y Chawakorn Detchkhunthot, que han muerto debido a la gravedad de las heridas sufridas durante estos enfrentamientos. Estos decesos se suman al de otro soldado fallecido el día anterior.
La tensión sigue creciendo en la zona a pesar de que la comunidad internacional ha pedido a ambos países ceñirse a los acuerdos alcanzados en verano y actuar con precaución. Las autoridades camboyanas, por su parte, han denunciado que ya son siete los muertos y casi una veintena los heridos en su territorio y han condenado de forma “enérgica” unos ataques que han tachado de “inhumanos y brutales”.
“A las 00.59 horas del 9 de diciembre de 2025 (18.59 del 8 de diciembre en la España peninsular y Baleares), el Ejército tailandés abrió fuego contra Camboya, intensificándose en la zona del distrito de Thma Puok, provincia de Banteay Meanchey, lo que provocó la muerte de dos civiles que viajaban por la carretera nacional 56″, ha relatado el Ministerio de Defensa de Camboya en su cuenta de la red social X, denunciando que las tropas del país vecino “continuaron disparando ininterrumpidamente durante toda la noche”.
En el comunicado, Nom Pen ha reiterado que el país vecino “ha violado el alto el fuego” y la declaración conjunta del pasado 26 de octubre, “al llevar a cabo otra agresión armada contra (su) integridad territorial”, por lo que ha instado a Bangkok que “vuelva a implementar” la tregua alcanzada entonces en Kuala Lumpur (Malasia).
Pese a ello, ha asegurado que las fuerzas camboyanas “siguen respetando e implementando inquebrantablemente todas las decisiones del Gobierno (…) de Camboya para resolver el problema de forma pacífica, de conformidad con el Derecho Internacional, a fin de proteger la soberanía, la integridad territorial y la seguridad del pueblo camboyano”.
Estas víctimas se suman a otros cuatro fallecidos y nueve heridos a manos del Ejército de Tailandia contra zonas de Preah Vihear y Oddar Meanchey, en la frontera entre ambos países, tras denunciar ataques por parte de tropas camboyanas, que habrían dejado un soldado tailandés muerto y varios heridos; unas informaciones que ha sido rechazadas por Nom Pen.
La situación ha llevado a miles de residentes a evacuar los distritos fronterizos ante la posibilidad de que se produzca un recrudecimiento de los ataques, según informaciones del diario ‘The Khmer Times’, mientras las autoridades de Vietnam y la Unión Europea han pedido cautela y contención.
Reacción de António Guterres
En la misma línea se ha manifestado en las últimas horas el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, que ha instado a Tailandia y Camboya a que “actúen con moderación y eviten una mayor escalada”. En palabras de su portavoz, Stéphane Dujarric, se ha mostrado “preocupado por (…) los nuevos enfrentamientos armados entre Camboya y Tailandia, en particular los ataques aéreos y la movilización de equipo pesado en la zona fronteriza” y ha lamentado que “ya (hay) numerosas víctimas y desplazamientos a ambos lados de la frontera“.
En este sentido, ha recordado a ambos gobiernos que “deben proteger a los civiles y facilitar la ayuda humanitaria“, les ha pedido que “vuelvan al marco del acuerdo” firmado en la capital malaya y ha expresado la disposición del organismo para “apoyar todos los esfuerzos encaminados a promover la paz (…) en la región”.


