
El asesinato del activista trumpista Charlie Kirk ha sacudido a la sociedad y la política estadounidenses. El joven de 31 años, padre de dos hijos, estaba ofreciendo una ponencia en la Universidad Utah Valley cuando, de repente, en un instante captado por las cámaras de algunos usuarios, recibió un disparo certero en el cuello que acabó con su vida.

Las incógnitas son muchas en estos momentos, especialmente en torno al autor del disparo, que sigue en busca y captura. El presidente de EEUU, Donald Trump, ha acusado a “la izquierda radical” del crimen, mientras que algunos políticos republicanos culpan directamente a los demócratas.
Un disparo a 180 metros… desde un tejado
El FBI ha solicitado la colaboración ciudadana para dar con el agresor. Las autoridades han informado de que el disparo que mató a Kirk se efectuó a unos 180 metros. Por tanto, ha debido realizarse con un fusil de largo alcance, que tampoco han encontrado.
“Se cree que el tirador disparó desde el techo de un edificio hacia el lugar del acto público en el patio estudiantil. No se pueden proporcionar aclaraciones adicionales para proteger la integridad de la investigación”, ha afirmado el Departamento de Seguridad Pública de Utah, que dirige, junto al FBI, las pesquisas.
El servicio de seguridad e inteligencia ha compartido un link en el que cualquier persona que tenga información, fotografías y vídeos de lo sucedido puede enviárselas para, en sus palabras, “ayudar a obtener más respuestas“.
Aunque no hay confirmación oficial, varios usuarios y medios han compartido un vídeo en redes sociales en el que se ve a un hombre señalado como el autor abandonando la universidad muy deprisa justo después del ataque.
Un detenido puesto en libertad tras el interrogatorio
Minutos después del ataque, el FBI informó de la detención de un sospechoso que, no obstante, fue liberado poco después, tras someterse al pertinente interrogatorio policial. Según el FBI, el hombre fue retenido durante varias horas y colaboró con los agentes.
“Perseguiremos a los culpables”
Con todo, Trump ha prometido que su Administración dará con los responsables del asesinato. En un video difundido en sus redes sociales, Trump aseguró que su Gobierno “perseguirá a los culpables” y preservará el legado de Kirk, a quien describió como “un patriota y defensor de la libertad de expresión“.
El mandatario ha expresado “su dolor” por la muerte del activista y ha culpado de “esta violencia” a la retórica de la izquierda radical. Además, ha mencionado ataques contra conservadores en otros momentos de la historia y en distintos lugares del país. Él mismo fue víctima de un atentado en julio de 2024, a apenas cuatro meses de las elecciones generales que lo llevaron de nuevo a la Casa Blanca.


