La madrugada del domingo, Europa despertó con una noticia que olía, y todavía huele, a guerra absoluta. Estados Unidos, se sumaba al ya temido conflicto entre Irán e Israel con el objetivo de destruir el programa nuclear iraní, del cual no existe una confirmación concreta. Y es que siete bombarderos B-2 volaron hasta el país persa en un vuelo de 18 horas, llevando a cabo toda una operación de inteligencia magistral que solo un país con los recursos y la experiencia de EE.UU. podría realizar.
En este contexto, cabe recalcar que en el tablero de la geopolítica, todo mensaje tiene un propósito y, sin duda, un trasfondo; desde la estrategia per se hasta las comunicaciones, y este, en muchos casos, se percibe sin tener siquiera que usar la hermenéutica. Mientras el presidente Donald Trump define el ataque como un “éxito militar espectacular”, deja caer al mundo lo que viene siendo su poderío y respaldo hacia Israel.
Por qué se llama ‘Martillo de Medianoche’
A lo largo de la historia, los nombres de las operaciones militares no han sido simples etiquetas logísticas. Al contrario, y como veníamos diciendo, han cumplido funciones propagandísticas, estratégicas e, incluso, psicológicas. En este caso, ‘Martillo de Medianoche’ evoca un concepto clave, ‘lo demoledor’. Esta herramienta representa fuerza bruta, precisión y la capacidad de penetrar estructuras fortificadas, como unas instalaciones nucleares subterráneas.
Por su parte, la media noche hace alusión a la hora del ataque, pero también cuando el enemigo es más ‘vulnerable’, es decir, en la oscuridad. Sobre las 00:00h de España, 01:30h en Irán, la operación de Washington alcanzó el territorio iraní con sus siete bombarderos apoyados por otros recursos militares, incluido un submarino que abrió fuego de apoyo, según explicó Estados Unidos.
Nombres de otras grandes operaciones militares
A lo largo de la historia, numerosas operaciones militares han tenido nombres inolvidables, tales como la Operación Overlord o Día D, la Operación Barbarroja en 1945, entre otras. Sin embargo, no es necesario retroceder mucho en el tiempo. A finales del siglo XX, la Operación Tormenta del Desierto, lanzada durante la guerra del Golfo, fue la primera guerra alguna vez televisada, al menos con cobertura 24h.
Otro caso fue el de la Operación Lanza de Neptuno, llevada a cabo en 2011 para capturar y eliminar a Osama bin Laden. El nombre hace alusión a Neptuno, dios romano del mar, y es un guiño directo a los Navy SEALs, la unidad de élite que ejecutó la misión.
Los efectos de la operación ‘Martillo de medianoche’
La operación fue descrita como la mayor misión de ataque jamás realizada por el B-2 Spirit y, con una duración de 18 horas, es decir, la más larga de un B-2 desde el inicio de la guerra de Afganistán en 2001. El general Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., dio a entender que las evaluaciones iniciales indican que los tres objetivos nucleares iraníes sufrieron daños y destrucción extremos.
Sin embargo, desde Teherán minimizaron el golpe y más bien alegaron que el material que albergaba Fordow fue trasladado previamente a otros lugares. “Irán no sufrió un gran golpe porque los materiales ya habían sido retirados”, argumentó el subdirector político de la radiodifusión estatal iraní, Hassan Abedini.