
Desde que Rusia decidió invadir Ucrania, las tensiones territoriales han ido en aumento por todo el mundo y el fantasma de la Tercera Guerra Mundial sigue sobrevolando el mundo. Un conflicto global supondría, además, el probable uso de armas nucleares.
En la actualidad, son nueve los países que poseen armamento atómico: Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido, India, Pakistán, Corea del Norte e Israel.

Pero en un futuro próximo, esa lista podría ampliarse en seis más. Es lo que revela este sábado un artículo publicado por el Daily Mail, que ha elaborado un listado con los países que están explorando la posibilidad de incorporar a sus arsenales la bomba atómica.
Irán
Irán es una de las principales amenazas para la paz mundial. El régimen de los ayatolás no solo es un peligro en sí mismo, sino que también da apoyo económico, político y militar a grupos terroristas como Hamás, Hizbulá, los hutíes y otros grupos islamistas.
Según el Centro de Estudios Internacionales y Estratégicos, un grupo de expertos en defensa y seguridad con sede en Washington, DC, Irán posee el arsenal de misiles “más grande y más diverso” de Medio Oriente. Su arsenal cuenta actualmente con unos 3.000 misiles balísticos, con un alcance de entre 300 y 6.000 kilómetros.
Estados Unidos e Israel están trabajando activamente para que Irán no complete su peligroso programa atómico. El problema es que Irán, a diferencia de los demás países de esta lista, ya es un estado paria y no es signatario de tratados internacionales que prohíben el desarrollo de armas nucleares, como el Tratado de No Proliferación Nuclear.
Arabia Saudí
Precisamente, el espectro de la proliferación nuclear iraní influye en la perspectiva estratégica de Arabia Saudí e incide directamente en el pensamiento del Reino sobre los méritos de la adquisición de armas nucleares.
Los dos países se encuentran enfrascados en una amarga y persistente rivalidad en la batalla por la hegemonía regional. La competencia entre ideologías religiosas —Irán es un estado chiíta, mientras que el Reino de Arabia Saudita es sunita— alimenta la enemistad entre ambos países.
Para Riad, el apoyo de Irán a organizaciones terroristas en toda la región, especialmente en Yemen, ha sido una preocupación estratégica desde hace mucho. Ambos países libran una guerra indirecta en Yemen desde al menos 2011.
También se han producido guerras sectarias por poderes entre ambos países en Irak, Líbano y Siria. Además del patrocinio estatal del terrorismo regional, la percepción de amenaza de Riad hacia Teherán se ve agravada por la amplia capacidad balística del estado chií.
Los misiles iraníes amenazan los intereses vitales de Arabia Saudí. Por ello, el príncipe heredero saudí, Mohamed Bin Salman, conocido como MBS, ha expresado su interés en desarrollar armas nucleares para disuadir a Irán.
Japón
Japón es el único país del mundo que ha sido atacado con una bomba nuclear, en concreto dos, las de Hiroshima y Nagasaki, que acabaron con la Segunda Guerra Mundial. Ahora, Japón se estaría planteando sumarse al club nuclear habida cuenta de que Asia es es la región más nuclearizada del mundo. La cercanía de regímenes hostiles nucleares como China y Corea del Norte y el riesgo de que la Tercera Guerra Mundial empiece con una invasión de la China comunista a Taiwán también son clave.
La nueva primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, ha indicado que Japón está considerando activamente la opción nuclear. Su gobierno está iniciando ya una revisión de las políticas nucleares de Japón.
Corea del Sur
Permanentemente amenazada por Corea del Norte, la ciudadanía de Corea del Sur está cada vez más de acuerdo con que el Gobierno de este país se dote de armamento nuclear.
Polonia
La guerra en la vecina Ucrania ha vuelto a poner de relieve la necesidad de que Varsovia construya defensas más fuertes. En marzo de 2025, Donad Tusk, el primer ministro polaco, manifestó el deseo de Polonia de adquirir capacidades relacionadas con la energía nuclear.
Si Polonia no logra adquirir su propia capacidad de armas nucleares, buscaría profundizar los acuerdos de cooperación en materia de seguridad con sus aliados, lo que implicaría estar bajo el paraguas nuclear francés o estadounidense.
Turquía
Turquía es el miembro más voluble de la alianza de la OTAN y a menudo socava la cohesión de la alianza. Ante la amenaza que representa Irán, Turquía, al igual que Arabia Saudí, ha declarado que buscará una capacidad nuclear independiente si el país chií desarrolla la suya. Turquía también ha expresado su preocupación por las armas nucleares de Israel.


