En Las Barias, Azua, una mujer denunció que su vivienda fue incendiada presuntamente por su expareja luego de que ella decidiera terminar la relación. Miguelina Peña Meléndez señaló que un hombre identificado como Polivio habría provocado el siniestro por no aceptar el fin del vínculo sentimental, generando un hecho que afectó a toda la familia que residía en el hogar.
“Él decía que si yo lo dejaba, él me iba a perjudicar físicamente. Como no logró perjudicarme físicamente, quemó la casa”, expresó Peña Meléndez, visiblemente afectada por la situación. La vivienda, heredada de su madre, albergaba a nueve personas, incluyendo a su hermano, quienes perdieron todos sus bienes y pertenencias en el incendio.
Según relató la denunciante, la familia quedó sin camas, techo ni objetos personales debido a que la acción violenta destruyó completamente la residencia. “Permanecíamos nueve personas. Ni cama, ni techo, ni nada, porque todo eso se fue abajo”, agregó, destacando el impacto total que tuvo el suceso sobre quienes vivían en el hogar y cómo el hecho dejó a todos en una situación de vulnerabilidad.
El siniestro dejó lesionados dentro de la familia. Un sobrino de Peña Meléndez, quien tiene una condición especial, resultó con quemaduras en la cara, manos y cuello, recibiendo atención médica por las lesiones ocasionadas durante el incendio. “Donde quiera que se mete, sea debajo de la tierra, que hay que buscarle debajo de la tierra, para que pague por lo que hizo”, manifestó el padre del menor, refiriéndose al presunto autor de la violencia.
Con una orden de arresto en mano, Peña Meléndez solicitó la intervención del presidente de la República para que la Policía Nacional detenga al presunto responsable. La mujer manifestó su temor de que el caso quede desatendido debido a sus limitados ingresos y a su procedencia de una familia humilde. Además, explicó que logró salir con sus dos niñas, de seis años y ocho meses, tras el incidente.
Tras la acción violenta, Peña Meléndez y su hermano quedaron sin vivienda ni pertenencias, apoyándose únicamente en la fe y la justicia para superar la tragedia. La comunidad observa consternada cómo un conflicto sentimental derivó en un hecho violento que destruyó un hogar y puso en riesgo vidas, mientras se espera que las autoridades actúen con rapidez y eficacia para garantizar la detención del presunto responsable y brindar protección a los afectados.
Por Redacción CDN

