El ministro de Exteriores de Irán, Abás Araqchí, acusó ayer a Estados Unidos de haber “traicionado la diplomacia” y “cruzar todas las líneas rojas” tras el ataque contra tres instalaciones nucleares en territorio iraní.
“Atacar una instalación nuclear es una violación imperdonable de la ley internacional y debe condenarse”, expresó Araqchí durante una rueda de prensa celebrada en Estambul, en el marco de la 51ª cumbre de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI).
“Voy a viajar a Moscú esta tarde y tengo una reunión con (el presidente ruso, Vladímir) Putin mañana por la mañana. Rusia es un amigo de Irán, tenemos una alianza estratégica y siempre nos consultamos mutuamente. También en los últimos tres o cuatro meses, cuando negociábamos con Estados Unidos, siempre hemos informado a nuestros amigos rusos sobre el progreso, o la falta de progreso”, indicó Araqchi.
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Araqchí afirmó además, que su país tiene “derecho legítimo” a responder al reciente ataque de Estados Unidos contra sus instalaciones nucleares, aunque no especificó cuál será la reacción.
“Mi país ha sido agredido y debemos responder en nuestro legítimo derecho de defensa propia. Haremos esto durante el tiempo que haga falta”, declaró Araqchí.
El jefe de la diplomacia iraní reconoció que, por ahora, no hay condiciones para reactivar canales diplomáticos “No estamos en una situación ahora para decidir cómo retomar la diplomacia ni con quién, esperemos a ver cuál será nuestra reacción, y cuando termine decidiremos cómo retornar a la diplomacia”, añadió.
En ese orden el ministro acusó a Washington de despreciar el derecho internacional “Estados Unidos no tiene respeto por la Carta de Naciones Unidas, no respeta la ley internacional. Solo entiende el lenguaje de la fuerza, y eso es profundamente desafortunado”, afirmó.
A pesar de la tensión, Teherán mantiene contactos indirectos con Washington a través de países mediadores como Omán. “Seguimos recibiendo mensajes por diferentes canales y, si es necesario, respondemos también a través de intermediarios”, aclaró.
Sobre los daños causados por los bombardeos, Araqchí admitió que aún se está evaluando su magnitud. “No sé cuánto espacio queda para la diplomacia, pero no solo Irán ha sido bombardeado; también lo han sido la Carta de la ONU y el imperio de la ley”, advirtió.
Durante una reunión celebrada en los márgenes de la cumbre de la Organización de Cooperación Islámica (OCI), Araqchí aseguró que “casi todos los ministros presentes están muy preocupados” y discuten formas de frenar la ofensiva israelí.
Araqchí también criticó al canciller alemán, Friedrich Merz, quien expresó apoyo a los ataques israelíes al señalar que “Israel hace el trabajo sucio para todos”, el ministro iraní calificó esa afirmación como “una vergüenza” y “muy desafortunada”, cuestionando el respaldo de Alemania a lo que llamó “trabajo sucio”.
Por último, acusó al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y a su director general, Rafael Grossi, de mostrar “parcialidad evidente” hacia los “belicistas”, al tiempo que los responsabilizó de “allanar el camino a la violencia”.