Milton Morrison, quien recientemente asumió la dirección del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), se enfrenta a su primer gran desafío tras un apagón general que afectó a Santo Domingo en la tarde de este viernes. La inesperada interrupción del servicio eléctrico ha generado una oleada de críticas y preocupación, especialmente porque ocurrió en un momento crítico, justo cuando Morrison tomaba las riendas de una de las instituciones más importantes para la gestión del transporte en el país.
Este evento ha encendido el debate sobre la capacidad del nuevo director para manejar las complejas demandas del sistema de tránsito y transporte terrestre en un país donde las deficiencias en la infraestructura y la planificación son evidentes. Muchos han señalado que la falta de coordinación y planificación entre las distintas áreas del gobierno ha exacerbado los problemas, llevando a situaciones como el apagón general que dejó a miles de personas sin energía y provocó caos en el tráfico de la capital.
La gestión de Morrison ha sido cuestionada desde el inicio, con detractores que sugieren que este incidente es un reflejo de las carencias en la planificación y la falta de un enfoque integral para abordar los desafíos del transporte en el país. La presión sobre Morrison y su equipo es palpable, y este incidente podría marcar un punto de inflexión en su gestión, obligándolo a tomar medidas rápidas y efectivas para restaurar la confianza pública.