Mike Kafka era considerado un coordinador ofensivo en ascenso y un fuerte candidato para ser contratado como entrenador principal en la NFL. Sin embargo, los acontecimientos del último mes podrían haber cambiado ese panorama. Como entrenador principal interino, Kafka no ha sido la solución para los problemas del equipo, aunque tampoco ha empeorado la situación de los Giants. La pregunta clave es: ¿están los Giants afectando la carrera de Kafka? La respuesta corta es que, definitivamente, no le han ayudado. Heredó un equipo en crisis: los Giants tenían un récord de 2-8, una racha de cuatro derrotas consecutivas y, aunque lograban construir ventajas en los primeros tres cuartos, eran incapaces de sostenerlas. Esta situación ya existía cuando Brian Daboll fue despedido. **REDACCIÓN FV MEDIOS**
