El Manchester City, que podría asegurarse otra Premier League si vence al West Ham en el Etihad este domingo, está bajo escrutinio debido a una posible sanción en Inglaterra por exceder los límites del fair-play financiero, acumulando 115 presuntas infracciones financieras.
Según Manchester Evening News, estas irregularidades, investigadas por un jurado independiente, abarcan desde 2009 hasta 2018, y se espera una resolución para el otoño de 2024, aunque cualquier castigo no se aplicaría hasta 2025.
Si se confirma la culpabilidad del City, la sanción típica sería la pérdida de puntos, ajustada según la gravedad del caso. Sin embargo, existe la opción de que el City pague una considerable multa de 415 millones (más de $452 millones de dólares) para evitar la pérdida de puntos, según el portal Manchester Evening News.
Este dinero beneficiaría tanto a la Premier League como a otros clubes afectados por las infracciones del City, incluyendo al Everton y al Manchester United, entre otros.
El caso del Manchester City es más complejo que otros, y este pago sustancial dejaría cualquier deuda saldada con la Premier League sin castigos deportivos. Este arreglo financiero, sin precedentes en su magnitud, provocaría controversia, ya que otros equipos sí fueron penalizados.
Las investigaciones sobre estas presuntas irregularidades financieras comenzaron en 2018 y han continuado desde entonces, revisando cada movimiento del club para reforzarse con grandes fichajes temporada tras temporada.
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