Un hecho registrado en el municipio de Nova Maringá, en el estado de Mato Grosso (Brasil), ha generado conmoción social luego de que el sacerdote Luciano Braga Simplício fuera señalado por un presunto comportamiento inapropiado con la prometida de uno de sus feligreses dentro de la residencia parroquial.
El episodio ocurrió el lunes 13 de octubre, cuando el novio de la joven, movido por sospechas de una supuesta infidelidad, ingresó abruptamente a la vivienda eclesiástica y grabó lo sucedido con su teléfono móvil.
En el material audiovisual, que posteriormente se difundió ampliamente en redes sociales, se observa al hombre derribando puertas de distintas habitaciones hasta localizar a la mujer oculta en el baño, bajo el lavamanos, en evidente estado de nerviosismo y entre lágrimas.
A raíz de la repercusión pública, la Diócesis de Diamantino, responsable de la jurisdicción parroquial donde ocurrieron los hechos, confirmó la apertura de una investigación canónica con el objetivo de esclarecer la situación y determinar si el sacerdote habría incumplido su voto de celibato.
En respuesta a las acusaciones, el padre Braga Simplício negó haber mantenido una relación impropia con la joven. En un audio divulgado tras la polémica, el sacerdote afirmó que la mujer simplemente había solicitado utilizar la ducha después de participar en actividades comunitarias organizadas por la iglesia.
Mientras la investigación eclesiástica continúa su curso, el caso ha provocado un intenso debate en plataformas digitales y en la opinión pública acerca de la ética dentro del clero, la confianza en las instituciones religiosas y la necesidad de mayor transparencia en los procesos internos de la Iglesia católica.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**