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La llamada “izquierda dominicana” está molesta con el presidente Luis Abinader por recibir en el país al presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia.
El Movimiento Izquierda Unida, liderado por el ministro Miguel Mejía, cuyo cargo carece de relevancia y sentido, sigue siendo un peso muerto para los bolsillos de los dominicanos. Una vez más, de manera tajante y desconsiderada, han contradicho la política diplomática del Gobierno.
Alianza País, liderado por Guillermo Moreno, que de pensamiento “izquierdista” no tiene nada, también rechaza la visita del legítimo mandatario venezolano. ¿Será que Guillermo Moreno está molesto con Abinader porque aún no ha conseguido un cargo en el Gobierno?
Ni hablar del Frente Amplio y otros pequeños grupúsculos que, lejos de representar ideales, viven como parásitos del erario público. No tienen nada que envidiarle al “Patrón de Jarabacoa” o a aquellos que se escudan bajo los apellidos de sus padres o abuelos para medrar.
Al presidente: no les preste atención a esos farsantes y siga posicionándose en el lado correcto de la historia.
La entrada Los vestigios de una clase trasnochada se publicó primero en De Último Minuto.
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