Estas piezas pueden ser utilizadas desde las decoraciones más clásicas hasta las más modernas
Si hay una pieza que se mantiene con fuerza en la decoración esos son los otomanos. Este pequeño mueble, también conocido como poufs o banquitos, es una pieza que ha estado presente en la decoración de interiores y exteriores a lo largo de la historia, especialmente en culturas del Medio Oriente, Europa y Asia. Se caracterizan por su forma baja y acolchada, lo que los hace versátiles y funcionales
Por su gran variedad de estilos, los otomanos pueden ser utilizados en decoraciones desde las clásicas hasta las modernas. Una de las claves está en el tapizado que puede ser en telas ricas, como terciopelo o seda, o fabricados con materiales más rigurosos como yute o algodón.
¡No te limites!
Más allá de los interiores, éstos son usados en patios, terrazas y jardines para crear áreas de descanso acogedoras. Puedes usarlos junto a mesas, en lounges o en espacios de entretenimiento al aire libre.
Además de embellecer los espacios, son muy útiles
Los otomanos pueden servir como puntos focales en cualquier espacio que lo ubiques, así sea en la habitación. Su diseño y color pueden complementar otros elementos decorativos, como cojines o cortinas, y pueden contribuir al esquema de color general del espacio. Y como si fuera poco, son ideales como asientos adicionales, reposapiés o incluso mesas auxiliares cuando se les coloca una bandeja encima. Su tamaño compacto los hace perfectos para espacios reducidos. Algunos están diseñados con almacenamiento interno, lo que proporciona una solución práctica para guardar mantas, juguetes o revistas sin ocupar espacio adicional.
Su elección
Los colores de temporada pueden variar según las tendencias de moda y diseño interior cada año. Te recomiendo que elijas los colores según el esquema de tu espacio y tus preferencias personales. También puedes considerar tendencias específicas de las temporadas actuales, como el minimalismo o el uso de texturas y patrones.