La controversia sobre el impacto del género en la estructura y funcionamiento del cerebro ha sido un tema de debate en la comunidad científica.
Recientemente, una investigación liderada por expertos de la Universidad de Stanford, utilizando avanzados modelos de inteligencia artificial (IA), ha arrojado luz sobre este asunto, revelando patrones distintivos en la organización cerebral de hombres y mujeres.
Publicado en la revista Eurek Alert, el estudio destaca que, mediante la utilización de la IA, se logró identificar con más del 90% de precisión el género de los individuos a partir de sus escáneres cerebrales, marcando un avance significativo en la comprensión de las diferencias sexuales en el cerebro.
Diferencias entre el cerebro de hombres y mujeres
Este descubrimiento aporta claridad a las discusiones sobre las diferencias cerebrales entre géneros, además de sugerir la importancia de estas distinciones en el tratamiento y comprensión de trastornos neuropsiquiátricos que presentan incidencias y manifestaciones distintas en hombres y mujeres.
El estudio subraya la relevancia del género en aspectos clave del desarrollo cerebral, el envejecimiento y la prevalencia de ciertas condiciones psiquiátricas y neurológicas, según explicó Vinod Menon, de la Universidad de Stanford y autor principal de la investigación.
A pesar de los hallazgos, el estudio no exploró las causas de estas diferencias, ya sean de índole hormonal, social o desarrolladas desde etapas tempranas de la vida.
El análisis se benefició de los últimos avances en IA y el acceso a extensas bases de datos, permitiendo un examen detallado de las imágenes de resonancia magnética funcional.
Modelo de red neuronal gracias a la IA
Este enfoque reveló que ciertas redes cerebrales, como la red de modo por defecto, el cuerpo estriado y la red límbica, juegan roles cruciales en la diferenciación de los cerebros masculinos de los femeninos.
Al aplicar un modelo de red neuronal profunda a 1,500 escáneres cerebrales, los investigadores pudieron distinguir de manera efectiva entre géneros, evidenciando diferencias previamente indetectables.
Además, se utilizó una IA explicativa para identificar las redes cerebrales más relevantes en la determinación del género basada en los escáneres, lo que permitió desarrollar modelos predictivos del desempeño cognitivo específicos para cada sexo.
Estos modelos demostraron ser efectivos al predecir el rendimiento en tareas cognitivas basándose en características cerebrales distintas entre hombres y mujeres, aunque funcionaron de manera diferente según el género del participante.
Los resultados sugieren que ignorar las diferencias de género en la organización cerebral podría ocultar aspectos cruciales relacionados con trastornos neuropsiquiátricos.
Menon enfatizó la eficacia de estos modelos para diferenciar patrones cerebrales por género, lo que podría tener implicaciones significativas en el campo de la neuropsiquiatría.
La metodología empleada en esta investigación ofrece nuevas vías para estudiar la relación entre la conectividad cerebral y diversas capacidades cognitivas o comportamientos, más allá de las diferencias de género.
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