Los padres de Marení Mateo, una mujer de 28 años presuntamente asesinada por sus vecinas Rosa María Apolinar y Rosi Rafaela Pulinario, solicitan al tribunal que se imponga la pena máxima de 30 años de prisión a las acusadas.

El incidente ocurrió en el sector San Miguel del Distrito Nacional. Según los padres de la víctima, las acusadas esperaron a Marení cuando se dirigía al trabajo y la atacaron con varias estocadas. La madre de Marení rechaza que el acto fuera en defensa propia, como argumenta la defensa.
Marení deja un hijo de cuatro años que pregunta por su madre. Víctor Mora, el padre de la víctima, describe a su hija como una persona querida y pide justicia. El abogado de las acusadas, Jorge Luis Vargas, sostiene que su clienta actuó bajo provocación, afirmando que Marení hizo varias llamadas a la madre de su defendida desde la madrugada.


