Los líderes del condado de Los Ángeles declararon estado de emergencia local este martes, según informaron autoridades locales. La noticia fue compartida en un comunicado en línea por la oficina de la supervisora del condado, Lindsey Horvath.
La medida responde a las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el condado de Los Ángeles, hogar de más de 10 millones de personas y una de las mayores poblaciones inmigrantes de Estados Unidos.
El condado ahora puede ofrecer apoyo financiero a residentes afectados por las redadas, incluyendo alivio de alquiler y acceso a fondos estatales para asistencia legal.
“Lo que ocurre en nuestras comunidades es una emergencia y el condado de Los Ángeles lo trata como tal”, declaró Horvath. “Declarar una Emergencia Local garantiza que todo el peso del gobierno del condado se alinee para apoyar a nuestras comunidades inmigrantes que son objetivo de acciones federales”, añadió.
La proclamación, fechada el 9 de octubre, permanecerá vigente hasta que la Junta de Supervisores la termine. Los departamentos del condado recibieron órdenes de “tomar las acciones de emergencia necesarias para proteger y estabilizar comunidades impactadas por acciones federales de inmigración”.
Los supervisores del condado votaron 4-1 a favor de la proclamación de emergencia para movilizar recursos del condado y apoyar a comunidades afectadas, a pesar de posibles desafíos legales del gobierno federal.
Funcionarios del condado afirmaron que las redadas han “creado un clima de miedo, llevando a una disrupción generalizada en la vida diaria y impactos adversos en nuestra economía regional”, incluyendo disminución en asistencia laboral, cierres temporales o permanentes de negocios, y mayor presión en escuelas, hospitales y lugares de culto.
La supervisora Janice Hahn dijo que la declaración de emergencia era necesaria para responder “al miedo, el dolor y el desorden que estas redadas del ICE están causando a nuestra comunidad”.
“Tenemos familias enteras que están en la indigencia porque sus padres o madres fueron llevados de sus lugares de trabajo”, declaró. “Quiero que nuestras comunidades inmigrantes sepan que estamos en esta emergencia con ellos”, añadió.
La supervisora Holly Mitchell también señaló que las redadas han envalentonado a otros a cometer actos de violencia y odio basados en raza.
El voto en contra vino de la presidenta de la Junta, Kathryn Barger, quien advirtió que la acción del condado podría provocar consecuencias legales.
“El gobierno federal tiene autoridad exclusiva para hacer cumplir la ley federal de inmigración, y los gobiernos locales no pueden impedir esa autoridad”, afirmó Barger. “En su lugar, deberíamos abogar por una reforma migratoria significativa que sea justa, pragmática y cree vías legales para quienes contribuyen a nuestras comunidades”.
En declaraciones a Fox News Digital, ICE afirmó que la “única emergencia es la que enfrentan los residentes de Los Ángeles después de elegir funcionarios que se burlan de la ley”.
“Quizás la junta debería ‘supervisar’ fondos para apoyar a víctimas de incendios que cumplen la ley y aún no se recuperan, en lugar de extranjeros ilegales criminales que buscan refugio en su ciudad santuario. Mientras alarman públicamente, me sorprendería que no estuvieran de acuerdo con que ICE removiera a un violador de niños de su vecindario”, añadió la portavoz Emily Covington.
Fox News Digital también contactó a la oficina de Horvath para obtener comentarios.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**