La República Dominicana se encuentra estratégicamente ubicada en el Caribe, ruta por donde transitan los fenómenos atmosféricos que se originan en la cuenca del Atlántico. Cada año, la región se prepara para enfrentar tormentas y huracanes que pueden causar devastación significativa con lluvias copiosas y vientos intensos. La magnitud del daño potencial depende directamente de la categoría del fenómeno (1-5) y su trayectoria.
En el caso específico de la tormenta Melissa, que afectó recientemente la región, Jamaica enfrentó los mayores impactos. Este sistema meteorológico se presentó inicialmente como tormenta tropical y se fortaleció hasta alcanzar categoría de huracán 4 o 5, representando una seria amenaza para la isla vecina.
El hecho de que Melissa solo haya mostrado a los dominicanos su faceta más benigna no significa que estuviera exenta de capacidad destructiva. No obstante, la experiencia acumulada a través de años enfrentando estos fenómenos naturales ha permitido al país desarrollar protocolos efectivos para la gestión integral antes, durante y después del paso de tormentas tropicales y huracanes. La República Dominicana se posiciona entre los países insulares del Caribe con mejores prácticas en manejo de desastres, reconocimiento respaldado por organismos internacionales especializados.
Si bien la nación ha demostrado capacidad para lidiar con estos eventos recurrentes, en esta ocasión particular merece especial reconocimiento la labor de la alcaldía del Distrito Nacional. La cobertura fue completa: no existió un solo sector de las tres circunscripciones que no recibiera atención por parte de las autoridades municipales. Esta intervención constituye un ejemplo destacable de gestión de desastres, liderado por la alcaldesa Carolina Mejía, la secretaria general Elizabeth Mateo y todo el equipo de trabajo que las acompaña.
¡Gracias por su entrega y compromiso con nuestra ciudad!
REDACCIÓN FV MEDIOS