Los New York Knicks comenzarán su temporada con importantes bajas en su alineación. Josh Hart y Mitchell Robinson estarán ausentes para el partido inaugural del miércoles contra los Cavaliers en el Madison Square Garden, luego de que ninguno de los dos participara en los entrenamientos del martes.
La ausencia de Hart —quien enfrenta espasmos lumbares, según confirmó una fuente de la NBA— parece comprensible dada su condición. Sin embargo, la indisponibilidad de Robinson genera múltiples interrogantes en el equipo.
Mientras los Knicks mantienen públicamente que Robinson no está lesionado y que su ausencia responde a un protocolo de “manejo de carga”, las dudas persisten. El entrenador Tom Thibodeau declaró el martes: “Si lo consideramos necesario, ¿podría jugar? Sí, podría hacerlo”.
Esta postura oficial contrasta con la información de una fuente de la liga, que revela que en realidad se trata del manejo de una lesión en el tobillo izquierdo de Robinson. Esta situación sugiere que el pívot habría sufrido algún contratiempo durante la pretemporada, recordando que el año pasado se perdió la mayor parte de la temporada regular tras someterse a una cirugía en ese mismo tobillo en diciembre de 2022.
Robinson ha enfrentado problemas recurrentes en su tobillo izquierdo —con una primera intervención en diciembre de 2022— y apenas disputó 31 partidos la temporada pasada. En la pretemporada actual, se perdió los dos últimos encuentros después de participar parcialmente en los tres primeros.
“Con Mitch, debemos ser inteligentes. Eso es parte del manejo de carga. Que pueda jugar esta noche o entrenar hoy no significa necesariamente que vaya a hacerlo”, explicó Thibodeau sobre el enfoque cauteloso que mantendrán durante toda la temporada.
En ausencia de Robinson, Jericho Sims emerge como posible sustituto en la posición de centro. El jugador, seleccionado en segunda ronda en 2021, acumuló experiencia en temporadas anteriores. Thibodeau ha manifestado su preferencia por reemplazar a los titulares con jugadores de características similares, evitando cambios drásticos en los roles del equipo.
Por su parte, Hart se perdió los últimos cuatro partidos de pretemporada. Aunque ha incrementado su trabajo en cancha, los Knicks prefieren no apresurar su regreso.
Estas ausencias impactan directamente en la rotación del equipo, particularmente en la unidad de banquillo que se proyectaba más sólida que la de la temporada anterior. Sin Hart, podrían aumentar los minutos de Donte DiVincenzo o abrirse oportunidades para Miles McBride.
“Estamos evaluando su espalda, que es una situación delicada, por lo que debemos ser cautelosos. No queremos apresurarlo. Seremos pacientes y tomaremos decisiones según evolucione”, concluyó Thibodeau sobre el caso de Hart.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**