Lo primero con el nuevo Sorento SX Prestige X-Pro que probamos en las Montañas Rocosas de Colorado es una amplitud interior que te hace sentir un poco como en un Telluride, icónico SUV de gran tamano del fabricante coreano Kia.
“Si es así logramos nuestro cometido”, dice Russell Wager, gerente de Marketing de esta marca que lleva más de diez años construyendo una interesante relación con su mercado y luego de un largo día en las carreteras cercanas a Denver.
Esperábamos más de 15 pulgadas de nieve en Devil’s Thumb Ranch de Tabernash, unas dos horas al Este de la capital de Colorado. Y las obtuvimos: autopistas cerradas y caminos vecinales llenos de barro y agua nos permitieron medir si el nuevo Sorento 2024 tiene lo necesario para superar las pruebas de la carretera en este duro entorno.
Ensamblado en la planta de Georgia, que puede producir hasta 350,000 vehículos anuales, el modelo presentado a los medios es el refresh de una de las más lógicas apuestas en un mercado como el de los SUV que crece sin parar y representa casi dos terceras partes del negocio para la marca en los Estados Unidos.
“Tiene un exterior más atrevido, con un frente más amplio… y un interior más aireado, con asientos repujados y un espejo retrovisor digital, además de un sofisticado sistema de asistencia, dice Mark Saviano, director de producto.
El paquete lo completa su motor de 2.5 litros con turbo que produce 281 caballos de fuerza, lo suficiente para no quedar atascado en medio de un sobrepaso urgente, llantas todoterreno y 4,500 libras de capacidad de arrastre.
El X-Pro es el primero de una serie que complementan el híbrido HEV y el plug-in híbrido PHEV, dos autos con configuración eléctrica que ya se encuentran en la línea de producción mientras escribimos esta nota y tienen como meta un consumidor más sensible al gasto de combustible; el X-Pro, con unas 28 mpg en promedio, no nos parece, sin embargo, muy gastador.
Lo más popular del nuevo Sorento X-Pro, en el caso de las familias latinas grandes, con tias y abuelitos a bordo, es que aprovecha con eficiencia sus tres filas de asientos (climatizados adelante) en una interesante relación capacidad-precio desde los $31,900 y hasta los $47,390 en la versión SX Prestige AWD que manejamos a través de los magníficos paisajes de Colorado.
Su modo de manejo nieve retiene la fuerza para que el auto no se deslice sin control sobre el hielo y controla su potencia hasta un punto que nos recuerda el freno de caja a quienes iniciamos a manejar con autos ‘stick’. Y sus llantas de 17 pulgadas ciertamente hacen lo suyo frente al agua y el barro en una de las peores nevadas en varios años en parajes acostubrados a inclemencia de sobra.
En conclusión, el X-Pro es sólido en el momento de acelerar, firme al tomar las curvas y espacioso a la hora de los paseos, un modelo que vale la pena tener en cuenta si se busca algo de aventura pero con la comodidad que nos merecemos.