Santo Domingo.- La joven cristiana que había sido vista deambulando en la calle 42 del sector Capotillo en circunstancias que llamaron la atención de vecinos y transeúntes, ya se encuentra bajo el resguardo de su familia desde la noche del domingo, según confirmaron allegados cercanos al caso.

Testigos indicaron que la joven fue observada en un estado de confusión, sin poder recordar con claridad detalles de su identidad ni de su entorno inmediato. Esta situación despertó preocupación entre los residentes, quienes notaron de inmediato lo inusual de su presencia en el lugar y decidieron actuar para facilitar su identificación.
Varios vecinos compartieron imágenes y reportes a través de redes sociales con la finalidad de ayudar a que sus familiares pudieran localizarla rápidamente. Gracias a esta colaboración comunitaria, la información llegó a manos de sus parientes en cuestión de horas, lo que permitió agilizar el reencuentro.
El sector Capotillo, situado en la zona norte del Distrito Nacional, es uno de los barrios más concurridos de la capital dominicana. La calle 42, en particular, se caracteriza por su constante actividad comercial y comunitaria, con un flujo continuo de personas que la recorren diariamente. Este movimiento hizo que la presencia de la joven sin acompañamiento resultara aún más notoria.
De acuerdo con lo narrado por sus parientes, una vez que recibieron la alerta sobre su paradero, se dirigieron de inmediato al lugar y lograron establecer contacto directo con ella. Posteriormente, la trasladaron hasta su residencia, donde aseguraron que se encuentra en buen estado tanto físico como emocional, pese a la confusión inicial en que fue hallada.
Aunque la familia no ofreció mayores detalles sobre las causas que pudieron motivar la situación, expresaron su gratitud por la colaboración recibida. Subrayaron que la disposición de los vecinos y la solidaridad mostrada fueron elementos determinantes para garantizar que la joven regresara a su hogar sin mayores contratiempos.
Este caso se suma a otros episodios recientes en los que la acción conjunta de la comunidad y la rápida circulación de información en redes sociales han resultado claves para reunir a personas extraviadas con sus seres queridos. La experiencia demuestra cómo la organización vecinal y la comunicación digital pueden desempeñar un papel fundamental en momentos de incertidumbre.
Actualmente, la joven, identificada por su entorno cercano como una persona de fe cristiana, permanece acompañada por sus familiares, quienes han decidido mantenerla bajo cuidado y apoyo mientras recupera la tranquilidad.




