Existe una vacante laboral en Dallas que podría ser ocupada internamente. El gobernador de los Dallas Mavericks, Patrick Dumont, concretó lo inevitable este martes al despedir al gerente general Nico Harrison, nueve meses después de que orquestara el polémico intercambio de la superestrella Luka Dončić a Los Angeles Lakers.
“Esta decisión refleja nuestro compromiso continuo de construir una organización de nivel campeonato”, declaró Dumont en un comunicado.
El traspaso de Dončić causó daños aparentemente irreparables al equipo y su fanaticada, dejando una franquicia en caída libre con una plantilla plagada de lesiones, la peor ofensiva de la conferencia y un récord de 3-8 (14º en el Oeste).
Michael Finley y Matt Riccardi asumieron interinamente, pero según Chris Mannix de Sports Illustrated, el entrenador Jason Kidd podría estar en línea para un ascenso a la oficina gerencial.
Mannix afirma que Kidd, quien llevó a los Mavericks a un campeonato improbable como jugador y a las Finales de la NBA como entrenador, mantiene “buena posición” con la propiedad y la fanaticada.
“Sus manos están (públicamente, al menos) limpias en el acuerdo Dončić”, añadió Mannix, “y nadie señala en su dirección por el fracaso de la plantilla lesionada de los Mavericks”.
Quienes conocen a Kidd sugieren que probablemente aceptaría el puesto, ya que ha anhelado influencia en decisiones de personal en destinos anteriores. “Es mejor supervisar la reconstrucción desde una oficina ejecutiva que desde el banquillo de entrenador”, señaló Mannix.
Una posible promoción de Kidd también podría abrir la puerta para que Dirk Nowitzki regrese a la franquicia en un rol de liderazgo, según propuso Mannix.
No hay forma de predecir cómo le iría a Kidd en un rol gerencial, pero su reputación entre la fanaticada podría inyectar optimismo en una franquicia que lo necesita desesperadamente.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**