Cuando la guerra en Oriente Medio amenaza con sufrir una preocupante escalada, Israel podría estar enfrentándose a una escasez de misiles interceptores, según ha explicado Dana Stroul, ex alto funcionario de defensa estadounidense, al Financial Times.
Stroul avisa de que si Hezbolá e Irán atacan el país hebreo de manera simultánea, en estos momentos sus defensas “se verían superadas”. Prueba de la delicada situación, siempre según el medio británico, es que las líneas de producción de Israel están trabajando “24 horas”.
Para ello, Boaz Levy, director ejecutivo de Israel Aerospace Industries, el fabricante estatal de los interceptores Arrow para derribar misiles balísticos, ha explicado que están implantando turnos triples para mantenerlas activas.
“No es ningún secreto que necesitamos reponer las existencias“, ha afirmado Levy ante la producción masiva de interceptores, que conforman la famosa Cúpula de Hierro que en tantas ocasiones ha actuado a lo largo de este último año.
Por ejemplo, en abril, con la ayuda de Estados Unidos y otros aliados, Israel logró detener el 99% de un ataque iraní con drones, misiles de crucero y misiles balísticos. Sin embargo, desde que el Ejército hebreo entrase en el Líbano son cada vez más frecuente los impactos de proyectiles en su territorio.
El “límite crítico” de EEUU
Estados Unidos ya ha anunciado que ayudará a Israel en su ofensiva y defensa contra Irán, que el 2 de octubre atacó al país hebreo con cerca de 200 misiles.
La línea roja la marcó la potencia norteamericana en que el Ejército israelí no atacase instalaciones nucleares ni petrolíferas persas, algo que parece que acatará el primer ministro Benjamin Netanyahu, quien ya ha confirmado que su objetivo serán infraestructuras militares.
En cualquier caso, Dana Stroul, también en declaraciones al Financial Times, ha señalado que Estados Unidos no puede sostener indefinidamente los esfuerzos de suministro tanto para Ucrania como para Israel, ya que los recursos están llegando a “un límite crítico”.
La última materialización del compromiso de EEUU con Israel ha sido el envío de forma provisional del sistema antiaéreo avanzado de Defensa de Área de Gran Altitud Terminal (Thaad, por sus siglas en inglés) para reforzar las defensas de su aliado ante el lanzamiento de misiles balísticos desde Irán.
