Israel ha acusado directamente al grupo político-militar chií libanés Hezbolá de esconder armamento en viviendas e infraestructura civil con el fin de “utilizar a los libaneses como escudos humanos” y ha publicado unas fotografías que evidenciarían la presencia de sistemas de misiles del grupo paramilitar en el ático de una casa familiar en la aldea de Houmine al-Tahta, en el sur del Líbano.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han descrito el equipo militar fotografiado como un cohete de largo alcance, almacenado en un lanzador hidráulico, que iba a ser “dirigido hacia civiles israelíes” y que estaba “listo para ser lanzado en cualquier momento desde una abertura en el techo”.
El portavoz de las FDI, Daniel Hagari, ha explicado “bajo el ático, en el primer piso, vive una familia libanesa que sirve de escudo humano”. “Esta es una prueba más de que Hezbolá ha convertido el sur del Líbano en una zona de guerra”, ha valorado Hagari en unas declaraciones recogidas por The Times of Israel.
Este es uno de los 1.600 objetivos materiales de Hezbolá destruidos por Israel, entre los que se encuentran misiles de crucero, cohetes pesados y vehículos aéreos no tripulados, especialmente detectados en el sur del país y en el valle de la Becá (este). Estas capturas se enmarcan dentro de la extensa ofensiva de Israel por la que han fallecido al menos 558 personas y más de 1.800 han resultado heridas.
“Estamos destruyendo la infraestructura militar que Hezbolá construyó durante 20 años. Esto es muy importante”, ha explicado el jefe del Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, en un vídeo distribuido por las FDI desde una evaluación en la sala de comando subterránea del ejército.
Halevi ha tildado los ataques de “operación ofensiva proactiva” y ha asegurado que Israel está “alcanzando objetivos y preparando las siguientes etapas”. “Al final, todo debe estar encaminado a crear las condiciones para que los residentes del norte regresen a sus hogares”, añadió, en referencia a los civiles israelíes desplazados hacia el sur.
