AZUA, República Dominicana. – La tranquilidad del municipio cabecera de Azua se ha visto alterada por una denuncia que involucra a una menor de edad. Yoni Cordero, un hombre que vive en condiciones de pobreza, declaró que su hija de trece años fue víctima de maltratos en un campamento infantil en Cotuí. Este suceso ha generado conmoción en la comunidad.
Cordero relató que confió a su hija a una pastora que inicialmente había ganado su confianza. La niña fue llevada a un campamento en Cotuí, lo cual parecía una experiencia positiva. Sin embargo, al pasar cerca de un mes, surgieron dudas cuando la pastora se mostró reticente a compartir información sobre el bienestar de la menor.
Decidido a conocer el paradero de su hija, Cordero localizó el campamento pero afirmó que no pudo reencontrarse con ella, ya que fue escondida. Tiempo después, la niña regresó al hogar familiar y compartió vivencias de presuntos maltratos durante su estancia.
La menor también mencionó que un incidente durante el campamento resultó en una tragedia que afectó a otro niño participante. Este hecho ha acrecentado las preocupaciones de las autoridades.
Ante las acusaciones, la pastora implicada se ha limitado a declarar que el caso está en manos de la fiscalía, declinando ofrecer más comentarios.
Las autoridades locales, en conjunto con la familia de la menor, han manifestado su compromiso en profundizar la investigación, garantizando que la niña afectada reciba la atención y protección necesarias.
La situación subraya la fragilidad de las familias económicamente vulnerables al poner su confianza en otros para el desarrollo de sus hijos. Mientras la fiscalía avanza en el análisis del caso, se espera esclarecer responsabilidades y tomar medidas preventivas.
La comunidad de Azua permanece atenta, esperando un pronunciamiento formal de las autoridades competentes.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**