WASHINGTON — El exoficial de inteligencia estadounidense Thomas Speciale, quien confrontó públicamente al exdirector de la CIA John Brennan sobre su interferencia en las elecciones presidenciales de 2016 y 2020, declaró que la investigación de la administración Trump sobre Brennan debe tratarse como una “restauración” de la confianza pública y no como “venganza”.
Speciale, veterano de la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) y de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (ODNI), asistió a un evento el 30 de octubre en la Universidad George Mason para cuestionar a Brennan sobre su respaldo al dossier Steele, “que se sabía era falso”, y sobre por qué firmó una carta que buscaba socavar los reportajes de The Post acerca de la laptop de Hunter Biden.
El exagente afirmó que la comunidad de inteligencia estadounidense participó en una operación de contrainteligencia “contra toda América” en 2016, y que Brennan junto al exdirector de Inteligencia Nacional James Clapper buscaron “influir en las elecciones de 2020” mediante una carta amplificada por Politico y utilizada como punto de debate por Joe Biden.
“Tiene que haber una investigación completa de transparencia total”, urgió Speciale, sugiriendo cargos de “conspiración sediciosa”.
Brennan defendió la firma de la carta en 2020 y acusó a Speciale de difundir “desinformación”, pero el veterano de inteligencia considera que el exjefe de la CIA estaba alterado porque su verdadera motivación para ambas acciones era que “odiaba a Trump”.
La exrepresentante Tulsi Gabbard acusó a Brennan, Clapper y al exdirector del FBI James Comey de participar en una “conspiración traicionera”.
Speciale hizo referencia a una cadena de correos electrónicos del 22 de diciembre de 2016, divulgada por Gabbard en agosto, donde Clapper enfatizaba que su ODNI, la CIA de Brennan, la NSA de Michael Rogers y el FBI de Comey debían estar “en la misma página”.
“Este es un proyecto que tiene que ser un deporte de equipo”, declaró Clapper a los otros tres.
Ese mismo día, Rogers había expresado “preocupaciones” sobre que su equipo no tenía “acceso suficiente a la inteligencia subyacente… para estar absolutamente seguros en sus evaluaciones”.
Speciale señaló que nunca había visto un correo electrónico de ese tipo y que esta fue una de las razones que lo motivaron a confrontar a Brennan recientemente.
El Comité Permanente Selecto de Inteligencia de la Cámara determinó en un informe de 2020 que Brennan ignoró a oficiales “veteranos” en diciembre de 2016 y ordenó la publicación de un informe de inteligencia “de calidad inferior” que afirmaba que Putin “aspiraba” a ayudar a Trump.
El informe del comité de 44 páginas sostuvo que detalles “fabricados” del dossier de Christopher Steele, financiado en parte por el Comité Nacional Demócrata y la campaña de Clinton, fueron incluidos forzosamente en la Evaluación de la Comunidad de Inteligencia (ICA) de 2017, a pesar de las objeciones de oficiales superiores.
Cuando se le cuestionó sobre la inclusión del dossier, que según analistas de inteligencia carecía de “estándares básicos de procedimiento”, Brennan respondió a su equipo: “Sí, pero ¿no suena verdadero?”.
En julio de este año, un analista de inteligencia senior denunció una campaña de presión por parte de oficiales de Obama que lo forzó a aprobar la evaluación de 2017 sobre la interferencia rusa en las elecciones.
“No puedes silenciar algo verdadero para influir en una elección política mediante el gobierno”, afirmó Speciale, quien también declaró que un oficial de Obama “anuló” su informe sobre amenazas de redes terroristas iraníes mientras la administración buscaba un acuerdo nuclear con Teherán.
“Es triste que el estado de situación en nuestro país sea que puedes embaucar a un grupo de oficiales de inteligencia para influir en una elección”, expresó Speciale. “Sé que estoy furioso”.
Representantes de Brennan no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentarios.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**