Las Escuelas Públicas de Chicago (CPS) implementaron una política que permite ausencias justificadas ilimitadas a estudiantes inmigrantes indocumentados cuando ellos o sus familiares manifiestan temor ante posibles actividades de aplicación de leyes migratorias federales.
La normativa, titulada ‘Codificación de Asistencia para Preocupaciones de Seguridad Relacionadas con Actividad de Representantes Federales’, fue obtenida por el grupo de vigilancia educativa Defending Education. El documento confirma que los estudiantes inmigrantes indocumentados pueden recibir ausencias ‘justificadas’ cuando un padre o tutor comunica a la institución educativa su temor hacia las autoridades migratorias federales.
En la política escolar, reafirmada por la junta escolar en febrero, las acciones de aplicación de inmigración se denominan ‘procedimientos relacionados con representantes federales’.
La normativa establece: ‘Si un padre/tutor reporta una ausencia y la atribuye al temor de procedimientos relacionados con representantes federales, las escuelas PUEDEN justificar la ausencia bajo “preocupación por la salud y seguridad del estudiante”. En el cuadro de memo, debe escribirse “preocupación por la salud y seguridad del estudiante”‘.
No se exigen detalles específicos sobre la ausencia, únicamente la indicación de que la salud y seguridad del estudiante podrían estar en riesgo. La política enfatiza explícitamente que ‘no proporciona un límite de tiempo’ sobre cuánto tiempo puede utilizarse el temor a la aplicación de inmigración federal para obtener ausencias justificadas.
Para que la ausencia sea considerada ‘justificada’, la razón debe comunicarse mediante uno de los métodos aprobados por el distrito escolar.
Adicionalmente, la política contempla que si un padre se encuentra ‘afectado por procedimientos relacionados con representantes federales’, puede designar a un tutor alterno para informar a la escuela que el niño requiere una ausencia justificada.
Otra disposición incluida en la normativa permite a los estudiantes obtener una ausencia justificada si desean participar en un ‘Evento Cívico’, definido como ‘un evento patrocinado por una organización sin fines de lucro o entidad gubernamental que está abierto al público’ y que ‘incluye, pero no se limita a, una presentación artística o cultural o reunión educativa que apoye la misión de la organización sin fines de lucro patrocinadora’.
Kendall Tietz, reportera investigadora de Defending Education, criticó la medida: ‘Las Escuelas Públicas de Chicago efectivamente le están diciendo a las familias que el temor a la aplicación de la ley federal es una excusa permanente para mantener a los niños fuera de clases sin límite de tiempo y sin registro documental’.
Tietz añadió: ‘CPS no debería convertir la política de asistencia en una herramienta de inmigración santuario. En cambio, las escuelas públicas deberían enfocarse en llevar a los niños a la escuela y mantener registros precisos, no alentar silenciosamente el ausentismo y obstruir la cooperación con las autoridades federales. Esta política socava tanto el aprendizaje estudiantil como el estado de derecho’.
Según su propio informe presupuestario, el sistema escolar recibió más de $1,500 millones en fondos federales provenientes de contribuyentes durante el año fiscal 2024.
En un contexto de preocupación por el uso de recursos, la Oficina del Inspector General de CPS reveló recientemente $14.5 millones en gastos de viaje ‘excesivos’ por parte del sistema escolar durante los años fiscales 2023 y 2024. Estos hallazgos contrastan con los bajos resultados académicos reportados: solo el 30.5% de los estudiantes en grados 3-8 demostraron competencia en lectura, y apenas el 18.3% mostró competencia en matemáticas durante la primavera de 2024.
Los representantes de CPS no respondieron a las solicitudes de comentarios sobre esta política.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**