En Estados Unidos, Miami, el huracán Erin, que hasta hace unas horas mantenía categoría 4, fue degradado a categoría 3 este domingo 17 de agosto por el Centro Nacional de Huracanes (NHC). A pesar de esta reducción, el organismo advirtió que continúa siendo un sistema de alta peligrosidad para las zonas bajo su influencia en el Atlántico y el Caribe.
El NHC explicó que el ciclón se mueve con rumbo oeste-noroeste a una velocidad de 20 kilómetros por hora, con vientos sostenidos que alcanzan los 205 kilómetros por hora y ráfagas de mayor intensidad. La trayectoria oficial prevé que su núcleo se desplace muy cerca del este de las Islas Turcas y Caicos entre el 17 y 18 de agosto, para luego internarse en mar abierto del Atlántico.
El informe detalló que los vientos huracanados se extienden hasta 35 kilómetros desde el centro del sistema, mientras que los vientos con fuerza de tormenta tropical se expanden hasta 220 kilómetros. Este rango amplio de afectación incrementa el impacto en islas del Caribe y en zonas costeras de Estados Unidos, incluso sin un impacto directo en tierra.
En el Caribe insular, los efectos indirectos ya se sienten en Puerto Rico, República Dominicana, Haití y Bahamas, donde se han registrado lluvias intensas, marejadas y ráfagas que complican la navegación. En Puerto Rico, los acumulados de lluvia podrían alcanzar entre 10 y 15 centímetros, generando riesgo de inundaciones urbanas y crecidas repentinas de ríos y quebradas.
El gobierno puertorriqueño informó que 160 mil abonados quedaron sin energía eléctrica en las horas de mayor fuerza del fenómeno. LUMA Energy indicó que las líneas de transmisión sufrieron daños considerables, lo que ocasionó un aumento en las interrupciones. No obstante, la gobernadora Jenniffer González señaló que las clases en escuelas públicas y las labores del Estado continúan, aunque algunas oficinas presentan filtraciones y acumulación de agua.
En cuanto a la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras, su reapertura dependerá de la recuperación del servicio eléctrico, por lo que las actividades académicas están condicionadas a la normalización de la infraestructura energética.
En Estados Unidos, el NHC advirtió que las marejadas generadas por Erin alcanzarán desde el lunes 18 de agosto la costa atlántica, con mayor incidencia en Florida, Georgia y las Carolinas, avanzando después hacia el noreste. Estas condiciones podrían generar resacas intensas, corrientes marinas peligrosas y erosión costera, lo que ha motivado advertencias preventivas.
Las áreas de riesgo comprenden desde Miami y Jacksonville hasta ciudades como Washington D. C., Filadelfia, Nueva York y Boston. Aunque no se espera un impacto directo en tierra, las autoridades de gestión de emergencias emitieron alertas para reforzar la seguridad en las comunidades costeras.
El NHC reiteró que Erin se mantendrá como huracán mayor en los próximos días, impulsado por las aguas cálidas del Atlántico y su interacción con sistemas de alta presión. Meteorólogos confirmaron que seguirán actualizando la información, ya que un cambio en su dirección podría representar una amenaza más directa para sectores costeros.
REDACCIÓN FV MEDIOS