Un niño de 5 años de Florida, identificado como William, se escapó de su casa mientras sus padres dormían y caminó solo hasta un local de Chick-fil-A, donde ya disfrutaba de un sándwich de desayuno cuando llegaron agentes de la Oficina del Sheriff de Jacksonville. “¿Me vas a llevar a la cárcel?”, preguntó el pequeño a los oficiales, según un comunicado del departamento. Los agentes Kelly y Perri respondieron que no lo arrestarían. Los policías llevaron al niño en patrulla hasta que reconoció su vivienda, donde tuvieron que saltar la cerca para informar a los sorprendidos padres. “Fue aterrador porque no nos dimos cuenta de lo que pasaba hasta después”, dijo su madre, Victoria, durante una reunión posterior en el restaurante. William agradeció a los oficiales con galletas por no arrestarlo durante su travesura. Su padre, Phil, calificó el incidente como “una aventura” que impactó al menor. **REDACCIÓN FV MEDIOS**
