Hamás liberó el sábado a los seis rehenes en el último intercambio con Israel, mientras el aumento de la tensión entre los adversarios enturbiaba el futuro del frágil acuerdo de alto el fuego.
Familiares y amigos de Eliya Cohen, de 27 años, se reúnen en Tel Aviv, Israel, para ver la retransmisión televisiva de su liberación por militantes palestinos en Gaza el sábado 22 de febrero de 2025. (AP Photo/Ohad Zwigenberg)

Entre los seis rehenes había tres israelíes secuestrados en el festival de música Nova y otro secuestrado mientras visitaba a su familia en el sur de Israel cuando los militantes irrumpieron a través de la frontera en los ataques del 7 de octubre de 2023 que desencadenaron la campaña de casi 16 meses de Israel en la Franja de Gaza.
Dos de los rehenes llevaban en manos de Hamás alrededor de una década, desde que cada uno de ellos entró en Gaza por su cuenta.
Cinco de los cautivos fueron entregados en ceremonias escenificadas que la Cruz Roja e Israel han condenado en el pasado: combatientes armados y enmascarados de Hamás los sacaron delante de cientos de palestinos antes de ser trasladados a vehículos de la Cruz Roja.
En la ciudad central de Nuseirat, Omer Wenkert, Omer Shem Tov y Eliya Cohen posaron junto a combatientes de Hamás en el escenario.
Un radiante Shem Tov incluso besó en la cabeza a dos militantes que estaban a su lado y lanzó besos a la multitud. Hamás ha recibido críticas por este tipo de exhibiciones públicas, que Israel, la ONU y la Cruz Roja consideran crueles y que no respetan la dignidad de los rehenes.
Durante la liberación, los familiares y amigos de Cohen en Israel corearon «¡Eliya! ¡Eliya! Eliya!» y vitoreaban cuando le veían. La abuela de Shem Tov ululó de alegría, gritando: «¡Omer, mi alegría! Mi vida!» al verlo.
El ejército israelí dijo que el último rehén, Hisham Al-Sayed, de 36 años, fue liberado más tarde el sábado.
El beduino israelí cruzó por su cuenta a Gaza en 2015 y había estado retenido desde entonces. Su familia ha declarado a los medios israelíes que a Al-Sayed se le había diagnosticado esquizofrenia.
La liberación de más de 600 palestinos encarcelados por Israel -la mayor liberación de prisioneros en un solo día en la primera fase del alto el fuego- se retrasó, al parecer por consultas de seguridad israelíes el sábado por la noche.
La liberación de rehenes se produjo tras una desgarradora disputa desencadenada esta semana cuando Hamás entregó inicialmente el cadáver equivocado de Shiri Bibas, madre israelí de dos niños secuestrados por los militantes.
Posteriormente se determinó que los restos que Hamás trasladó el jueves junto con los cadáveres de los niños eran los de una mujer palestina.
En respuesta, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió venganza por «una violación cruel y maliciosa», mientras que Hamás sugirió que había sido un error.
El viernes por la noche, el pequeño grupo militante que se cree que retenía a Bibas y a sus hijos -las Brigadas Muyahidines palestinas- entregó un segundo cadáver. La familia de Bibas dijo que las autoridades forenses israelíes confirmaron que los restos eran suyos.
«Durante 16 meses hemos buscado la certeza, y ahora que está aquí, no trae ningún consuelo, aunque esperamos que marque el comienzo del cierre», dijo la familia.
«Durante 16 meses buscamos una certeza, y ahora que está aquí, no nos reconforta, aunque esperamos que marque el comienzo del cierre», declaró la familia.
Hamás negó el sábado las afirmaciones israelíes de que era responsable de la muerte de los niños Bibas, calificándolas de mentiras destinadas a justificar las acciones militares israelíes contra civiles en Gaza.
Probables negociaciones difíciles sobre la próxima fase del alto el fuego
El acuerdo de alto el fuego ha detenido los combates más mortíferos y devastadores jamás librados entre Israel y Hamás, pero se teme que la guerra se reanude una vez finalizada la primera fase.
Hamás ha declarado que liberará cuatro cadáveres la próxima semana, con lo que se completará la primera fase. Después, Hamás retendrá a unos 60 rehenes, de los que se cree que aproximadamente la mitad están vivos.
Las conversaciones sobre la segunda fase del alto el fuego aún no han comenzado, pero es probable que las negociaciones sean más difíciles.
Hamás ha afirmado que no liberará al resto de cautivos sin un alto el fuego duradero y la retirada total de Israel de Gaza.
Netanyahu, con el pleno respaldo de la administración Trump, afirma que se ha comprometido a destruir las capacidades militares y de gobierno de Hamás y a devolver a todos los rehenes, objetivos que en general se consideran mutuamente excluyentes.
Un funcionario israelí dijo que Netanyahu se reuniría con asesores de seguridad el sábado por la noche para tratar el futuro del alto el fuego.
El funcionario, que habló bajo condición de anonimato porque la reunión no había sido anunciada formalmente, dijo que las discusiones se centrarían «en el objetivo de devolver a todos nuestros rehenes, vivos y muertos.»
Los rehenes liberados dan alivio y señales de vida
Cohen, Shem Tov y Wenkert fueron sacados vistiendo uniformes falsos del ejército, aunque no eran soldados cuando fueron secuestrados.
«Este es un momento inolvidable, en el que todas las emociones se mezclan rápidamente», declaró la familia de Shoham, que pidió un acuerdo para liberar a todos los que siguen retenidos. «Hay una oportunidad; no debemos desaprovecharla».
Shoham, que también tiene ciudadanía austriaca, estaba visitando a su familia en el kibutz Be’eri cuando militantes de Hamás irrumpieron en el lugar. Su esposa y sus dos hijos pequeños fueron liberados en un intercambio en noviembre de 2023.
Los familiares y amigos de Mengistu rompieron a cantar al verle por primera vez en una década.
«¿Te acuerdas de mí?», preguntó un hermano mientras se abrazaban.
Niva Wenkert, madre de Omer, declaró al Canal 12 israelí que «en apariencia, parece estar bien, pero no se sabe lo que hay dentro».
Mientras crecía la preocupación por el resto de rehenes, Ilan Gilboa Dalal, padre del cautivo Guy Gilboa-Dalal, declaró a la cadena pública israelí Kan que la familia había recibido la primera señal de vida en ocho meses de un rehén recién liberado que había estado retenido con él.
Cientos de palestinos a punto de ser liberados
Entre los 620 presos palestinos que serán liberados hay 151 que cumplían cadena perpetua u otras condenas por ataques violentos contra israelíes. Casi 100 serán deportados, según la oficina de prensa de los presos palestinos.
Según una asociación palestina de defensa de los derechos de los presos, entre ellos se encuentra Nael Barghouti, que pasó más de 45 años en prisión por un atentado en el que murió un conductor de autobús israelí.
También han sido liberados 445 hombres, 18 menores de entre 15 y 17 años, cinco de entre 18 y 19, y una mujer, todos ellos detenidos sin cargos por las tropas israelíes en Gaza durante la guerra.
La ofensiva militar israelí ha matado a más de 48.000 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, que no distingue entre civiles y combatientes. Israel afirma que ha matado a más de 17.000 combatientes, sin aportar pruebas.
La ofensiva destruyó amplias zonas de Gaza. En su punto álgido, la guerra desplazó al 90% de la población de Gaza. Muchos han regresado a sus hogares para encontrar que no queda nada y que no hay forma de reconstruirlos.
El ataque del 7 de octubre mató a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles. Cientos de soldados israelíes han muerto en la guerra.
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