Google ha anunciado recientemente que eliminará millones de registros de las actividades de navegación de los usuarios como parte de un acuerdo alcanzado en una demanda colectiva. Esta demanda, presentada en 2020, alegaba que Google estaba recopilando datos de navegación de manera subrepticia de las personas que utilizaban su popular navegador web Chrome en modo incógnito.
El modo incógnito de Chrome permite a los usuarios navegar por la web sin que se almacenen datos de navegación en el historial del navegador. Sin embargo, la demanda argumentaba que, a pesar de activar esta función, Google seguía recopilando datos a través de otras herramientas utilizadas por los sitios web, como su tecnología publicitaria. Según los detalles del acuerdo revelados en una presentación ante el tribunal federal de San Francisco, Google se compromete a eliminar “miles de millones” de registros de datos que reflejan la navegación privada de las personas.
Google también ha realizado cambios en sus divulgaciones para clarificar cómo se recopilan los datos de los usuarios y qué actividad es visible en los sitios web cuando se navega en modo incógnito. Además, la compañía acordó permitir a los usuarios bloquear las cookies de terceros mientras estén en modo incógnito durante los próximos cinco años.
Este acuerdo ha sido bien recibido por los demandantes y sus representantes legales, quienes lo han calificado como “innovador” y un “paso histórico” hacia una mayor transparencia por parte de las grandes empresas de tecnología en cuanto a la recopilación y uso de datos de los usuarios.
Transparencia con los datos
El acuerdo entre Google y los demandantes es significativo no solo por la eliminación retroactiva de los datos de los usuarios, sino también porque establece un precedente importante en cuanto a la transparencia de las grandes empresas de tecnología en relación con la recopilación y uso de datos de los usuarios. Los representantes de los consumidores involucrados en la demanda han expresado que el acuerdo proporciona un “alivio sustancial” para los demandantes y que marca un hito en la lucha por la privacidad en línea.
Este acuerdo llega en un momento en que las empresas de tecnología enfrentan una creciente escrutinio por parte de los reguladores y los usuarios en relación con sus prácticas de recopilación de datos. Las preocupaciones sobre la privacidad en línea han llevado a un aumento en las quejas, demandas y acciones regulatorias dirigidas a empresas que recopilan o comparten datos de manera inesperada.
La resolución de esta demanda también evita un juicio previsto para febrero y llega en medio de otros casos legales importantes que enfrenta Google, incluida una demanda del Departamento de Justicia de EE.UU. y una coalición de fiscales generales estatales que acusan a la empresa de violar las normas antimonopolio.
Este acuerdo no solo representa un paso hacia una mayor transparencia y responsabilidad por parte de las grandes empresas de tecnología, sino que también envía un mensaje claro sobre la importancia de proteger la privacidad de los usuarios en línea en un mundo cada vez más digitalizado.
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