Un total de 10 reclusos hispanos privados de la libertad en penales del estado de Nueva York vivirán un 2025 en sus hogares y comunidades, fuera de prisión, pues están dentro del grupo de 22 internos que recibirán clemencia por sus condenas, anunciado por la gobernadora, Kathy Hochul. Los presos beneficiados han purgado buena parte de sus penas y han estado tras las rejas entre 20 y 40 años, muchos de ellos por delitos relacionados con drogas.
Así lo reveló la mandataria estatal, tras advertir que su administración continúa promoviendo diferentes esfuerzos para reformar el proceso de clemencia, incluida la convocatoria de un panel asesor de expertos imparciales, la asignación de recursos de personal adicional y el aumento de la comunicación con los solicitantes del beneficio.
“Al asumir el cargo, implementé una serie de reformas para aportar mayor transparencia y responsabilidad al proceso de clemencia, y seguiré trabajando con las fuerzas del orden, los grupos de derechos de las víctimas, fiscales, defensores de la reforma y todas las partes interesadas, para garantizar que este proceso se lleve a cabo de manera responsable”, comentó la Gobernadora, tras revelar la lista de beneficiados.
Sabino de los Santos, de 59 años, y condenado por posesión delictiva de una sustancia controlada en séptimo grado, en 1999, Bienvenido Padilla Pichardo, de 46 años, condenado por facilitación de delitos en cuarto grado, en 2007, y José Zorrilla, de 42 años, condenado por venta delictiva de una sustancia controlada en cuarto grado, en 2005, verán la libertad gracias a la decisión de la mandataria.
Asimismo, Julio Cuello Guzmán, de 62 años, condenado por intento de venta delictiva de una sustancia controlada en tercer grado, en 1999, Jaime Restrepo, de 49 años, condenado por venta delictiva de una sustancia controlada en tercer grado, en 2002 y Luis Sánchez, de 62 años, condenado por posesión delictiva de un arma en tercer grado e intento de posesión delictiva de propiedad robada en primer grado, en 1986.
La lista de reclusos hispanos que recibieron el perdón a sus condenas por parte de la Gobernadora Hochul termina con Pablo Pulido, de 59 años, condenado por asalto en tercer grado, en 2005 e intento de venta delictiva de una sustancia controlada en tercer grado, en 1987, José González, de 65 años, condenado por intento de venta delictiva de una sustancia controlada en tercer grado, en 1991 y Herbert Martin, de 62 años, condenado por robo en tercer grado en 1981. La única mujer hispana que recibió la clemencia fue Efigenia Canelo, de 61 años, condenada por intento de venta delictiva de una sustancia controlada en tercer grado en 2001.
Dentro del grupo completo de los 22 beneficiados, hubo una reducción de sentencia para Trevers Jackson, de 57 años, declarado culpable de corrupción empresarial, robo en segundo grado y cargos asociados, en 2004, quien fue sentenciado a entre 25 años y cadena perpetua. Tras haber cumplido casi 22 años de condena, su sentencia se está conmutando para que pueda comparecer antes ante la Junta de Libertad Condicional para que la junta pueda determinar si es apto para la libertad condicional.
Timothy O’Brien, de 74 años, condenado por posesión delictiva de una sustancia controlada en tercer grado hace 46 años y por posesión de una droga peligrosa en sexto grado, hace 53 años, es el interno d mayor edad que recibió el amparo.
Desde que Hochul asumió las riendas del Estado de Nueva York, ha concedido un total de 94 actos de perdón de condenas, buena parte de ellos, a latinos.
La Gobernación de Nueva York recalcó que las personas a las que se les concedió el indulto “han vivido vidas libres de delitos” durante más de una década (y en muchos casos varias décadas) y han demostrado contribuciones positivas a sus comunidades.
“Varios de los beneficiarios del indulto de hoy fueron condenados por un delito mientras vivían en el estado de Nueva York, pero desde entonces se han mudado a otros estados. Las personas que recibieron el indulto han seguido viendo sus vidas afectadas por sus condenas penales. Los indultos de la Gobernadora ayudarán a aliviar estos desafíos”, agregó la oficina estatal.
