FOXBOROUGH, Mass. — Los Giants se mostraron como uno de los peores equipos de la NFL durante todo el partido. Tras una serie de colapsos en el cuarto cuarto que llevaron al despido del entrenador Brian Daboll y del coordinador defensivo Shane Bowen, los Giants encajaron en el molde de un equipo sin rumbo, evidenciado el lunes por la noche en una derrota 33-15 ante los Patriots. Los Giants (2-11) permitieron 30 puntos en la primera mitad por primera vez desde el partido final de la temporada 2009, lo que deja una inquieta semana de descanso por delante. Los Patriots (11-2) demostraron que la esperanza de los Giants de igualar su transformación de un año con un nuevo entrenador y un joven mariscal de campo estrella se siente más como un sueño imposible que como una realidad. La única vez que los Giants mostraron algo de verdadera lucha en el tercer partido del entrenador interino Mike Kafka al mando fue cuando Theo Johnson recibió una penalidad por conducta antideportiva por embestir a Christian Ellis, después de que Ellis derribara a un Jaxson Dart que escapaba por la banda. Dart, quien regresaba de una conmoción cerebral, avanzó con prudencia por la banda mientras perseguía una primera oportunidad y le dio a Ellis la oportunidad de conectar un golpe limpio. Drake Maye (24 de 31 pases completados para 282 yardas y dos touchdowns) superó a Dart (17 de 24 para 139 yardas y un touchdown) en una batalla de mariscales de campo que los Giants habían codiciado en las últimas dos clases del draft. La multitud local coreó “M-V-P” a Maye. **REDACCIÓN FV MEDIOS**



