Gary Oldman habla con franqueza sobre su sobriedad.
El actor de “Slow Horses” compartió detalles sobre su lucha contra el alcoholismo y su sobriedad desde hace 28 años en una entrevista con The Hollywood Reporter, publicada el lunes 18 de agosto.
“Estoy en un muy buen momento ahora, y mucho de eso tiene que ver con la sobriedad”, comenzó Oldman, de 67 años. “Han pasado 28 años. Hubo un punto en el que no creía poder estar 28 segundos sin beber”.
Aunque el actor de “Harry Potter” no evadió responsabilidad sobre su adicción, reconoció que muchos de sus “héroes” eran “todo tipo de borrachos y drogadictos”, lo que influyó en su decisión de empezar a beber.
“Eran todos poetas y artistas torturados”, compartió Oldman. “Los admiras, los romantizas y quieres emularlos”.
“Era una norma social, y en algún momento se salió de control”, continuó. “Y eso no tiene que ver con nadie más que conmigo. Pero lo glamorizas, ese tipo de comportamiento loco”.
Un héroe en particular fue Richard Burton, quien supuestamente se emborrachaba cada noche antes de salir al escenario para interpretar a Shakespeare.
“Lees sobre Richard Burton, quien creo que hizo 136 funciones de Hamlet, ocho shows por semana en Broadway”, dijo Oldman. “Bebía una botella entera de vodka y luego interpretaba el papel completamente borracho”.
Sin embargo, el actor de “The Dark Knight” eventualmente entendió que su vida era mejor sin alcohol y lo dejó para siempre en 1997.
“Es solo una excusa, realmente, y te engañas a ti mismo”, explicó. “Mi vida personal es inconmensurablemente mejor por no vivir en una niebla. Pero creo que el trabajo también es bueno”.
“Yendo al ritmo que llevaba, no estaría aquí sentado contigo ahora”, añadió Oldman. “Estaría muerto o institucionalizado”.
No es la primera vez que el ganador del Oscar habla sobre su lucha contra el alcoholismo.
En 2021, tras interpretar al guionista alcohólico Herman J. Mankiewicz en el biopic “Mank” (2020), Oldman contó al Los Angeles Times que su consumo era tan grave que “solía sudar vodka”.
“Se vuelve parte de ti”, compartió entonces. “Mi lengua estaba negra por las mañanas. Lo culpaba al champú”.
“No le desearía ni a mi peor enemigo estar atrapado en eso”, agregó Oldman. “Es un infierno. Y ese humor autocrítico? Solo está para enmascarar la inadecuación”.
A diferencia de Mankiewicz, quien falleció por envenenamiento urémico en 1953 a los 55 años, Oldman logró la sobriedad tras dos rehabilitaciones, aunque fue un alcohólico funcional durante sus primeros 20 años de vida adulta.
“Cuando bebía, trabajaba y recordaba mis líneas, así que sentía que me salía con la mía, aunque, en el fondo, bajo la negación, lo sabes”, concluyó Oldman.
REDACCIÓN FV MEDIOS