Un investigador de Harvard quedó ensangrentado y golpeado presuntamente por una pandilla de adolescentes ruidosos después de pedirles que guardaran silencio en una sala de cine en Boston.
Thiago Rentz, un investigador de Harvard de 35 años originario de Brasil, estaba viendo la película de terror “Weapons” en el AMC Boston Common 19 cuando pidió varias veces a cinco adolescentes que se callaran. Según NBC Boston, el grupo comenzó a golpearlo.
“Estaban allí molestando a todos, aplaudiendo y gritando todo el tiempo”, dijo Rentz al medio. “Les pedí respeto. Les pedí que salieran de la sala porque solo queríamos ver la película”.

Cuando Rentz intentó salir del teatro, afirmó que los adolescentes no lo dejaron pasar. “Hicieron como una pared, así que intenté pasar para irme y no me dejaron”, explicó el investigador, añadiendo que su amiga gritaba pidiendo ayuda.
“Me golpearon. No me defendí. Estaba asustado y me puse frente a la pared, protegiendo mi cara y cabeza, pero el objetivo era claramente mi cabeza porque me golpeaban ahí y en la cara”.
Imágenes de Rentz después de la supuesta agresión muestran su ojo izquierdo severamente magullado, su boca ensangrentada y una de sus manos manchada de sangre. “Era uno contra cinco”, relató.
El grupo huyó rápidamente mientras la amiga de la víctima buscaba ayuda desesperadamente. Encontró a un guardia de seguridad, quien llamó a las autoridades, según el medio.
La policía de Boston llegó alrededor de las 12:45 a.m., cuando el teatro ya estaba cerrado. Un informe policial indicó que Rentz sufrió una lesión menor en la nariz.
“El acoso no es bueno en un espacio público… Esto es absurdo, creo que necesitan contratar más personal de seguridad”, dijo Rentz.
Ahora busca que se revisen las cámaras de seguridad para identificar a los adolescentes, quienes vestían de negro pero tenían el rostro descubierto. “Quiero que los atacantes sean identificados porque deben ser castigados”, afirmó.
Este incidente es el último de una serie de ataques violentos protagonizados por adolescentes en Estados Unidos.
En mayo, un grupo golpeó brutalmente a dos niñas en un parque de Queens con un bate de béisbol e incluso le rapó la cabeza a una de las víctimas en un acto calificado por un familiar como un intento de “ejecución”.
Ese mismo mes, cientos de jóvenes se reunieron en un centro comercial de Nueva Jersey en un encuentro organizado en TikTok que derivó en una pelea masiva con siete menores arrestados.
Varios negocios han implementado políticas de acompañamiento para adolescentes con el fin de reducir la delincuencia juvenil.
El miércoles, un local de Chick-fil-A en Ohio publicó en Facebook una norma que exige que los menores de 17 años estén acompañados por un adulto mayor de 21 años, advirtiendo que “los menores no acompañados podrían ser expulsados”.
En marzo, una tienda Target en Brooklyn prohibió la entrada a menores de 18 años sin supervisión adulta. Además, un McDonald’s en Brooklyn comenzó en febrero a pedir identificación y a restringir el acceso a menores de 20 años sin un padre o identificación válida.
REDACCIÓN FV MEDIOS


