LOS ÁNGELES – En una noche de béisbol que será recordada por décadas, Freddie Freeman protagonizó uno de los momentos más emblemáticos de la Serie Mundial. El viernes, en el Dodger Stadium, Freeman conectó el primer grand slam de oro en la historia de la Serie Mundial, sellando la victoria de los Dodgers sobre los Yankees con un marcador de 6-3 en la décima entrada.
A pesar de un esguince severo en su tobillo derecho, Freeman se acercó al plato en un momento crítico, con las bases llenas y una multitud expectante. Con un swing preciso, envió la pelota a las gradas del jardín derecho, logrando la hazaña y desatando una euforia en el estadio. Su épico grand slam evoca recuerdos del histórico jonrón de Kirk Gibson en 1988, y se erige como uno de los momentos más icónicos del Clásico de Otoño.
Este Juego 1 era altamente anticipado, enfrentando a los Dodgers y a los Yankees, los primeros sembrados de la Liga Nacional y Americana, respectivamente, en su primer enfrentamiento en una Serie Mundial en 43 años. Con esta victoria, los Dodgers se aseguran una ventaja importante, ya que históricamente, los equipos que ganan el primer juego en series al mejor de siete, terminan llevándose la serie el 65% de las veces.
Freeman y su heroica actuación en el Juego 1 de la Serie Mundial 2024 quedarán grabados en la memoria de los fanáticos y en los libros de récords, marcando el inicio de una serie que promete más momentos inolvidables.
