El gobernador Ron DeSantis ordenó el martes que las banderas de Estados Unidos y de los estados de Florida ondeen a toda asta el lunes, día de la inauguración presidencial de Donald Trump.
La decisión de DeSantis convirtió a Florida en el último estado liderado por republicanos en hacerlo, mientras que las banderas de todo el país ondean a media asta en señal de duelo tras la muerte del presidente Jimmy Carter.
DeSantis, republicano y fiel aliado del presidente electo Donald Trump, anunció la orden en una carta dirigida a Brian Fienemann, director de Gestión y Desarrollo Inmobiliario en Florida.
Las banderas de Florida ondeaban a media asta, al igual que en todo el país, según una proclama del presidente Joe Biden emitida el 29 de diciembre para honrar a Carter, el 39.º presidente de los Estados Unidos que murió ese día a la edad de 100 años.
Las banderas ondearán a media asta durante 30 días.
Tras el anuncio de Biden, Trump emitió un comunicado en el que acusaba a los demócratas de estar “emocionados” de que las banderas ondearan a media asta durante su toma de posesión.
“Creen que es genial y están muy contentos porque, en realidad, no aman a nuestro país, solo piensan en ellos mismos”, se quejó Trump en su plataforma de redes sociales Truth Social.
“Debido a la muerte del presidente Jimmy Carter, la bandera puede, por primera vez en la historia, ondear a media asta durante la toma de posesión de un futuro presidente. Nadie quiere ver esto y ningún estadounidense puede estar contento con ello”.
La orden en Florida se dio el mismo día en que el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, republicano por Luisiana, accedió el martes a la solicitud de Trump de suspender el período de luto de 30 días durante la toma de posesión del presidente electo, lo que permitiría que las banderas ondearan a toda su asta durante el día.
El lunes, la gobernadora de Alabama, Kay Ivey, y el gobernador de Texas, Greg Abbott, ambos republicanos y aliados de Trump, ordenaron que las banderas en sus estados ondeen a toda su asta el 20 de enero.
Ivey y DeSantis declararon que las banderas de sus estados volverían a ondear a media asta después del día de la investidura. Johnson dio la misma orden sobre las banderas en el Capitolio. No se conoce si Texas haría lo mismo.
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