Hoy 22 de mayo se celebra una fecha clave para los fanáticos del entretenimiento digital: el Día Mundial de Pac-Man, que este año conmemora el 45.º aniversario del famoso personaje amarillo que revolucionó la industria de los videojuegos desde su aparición en 1980.
Creado por el diseñador japonés Toru Iwatani, Pac-Man nació con un propósito muy distinto al de sus contemporáneos: ofrecer una alternativa lúdica y amigable, en un entorno dominado por juegos bélicos y de disparos.
Su diseño se inspiró en algo tan cotidiano como una pizza a la que le falta una porción. A partir de esa sencilla imagen, nació una de las franquicias más queridas del entretenimiento global.
Un fenómeno que trascendió generaciones
En su debut, Pac-Man fue un cambio de paradigma. Apostó por una mecánica sencilla (recorrer un laberinto comiendo puntos y evitando fantasmas) y por una estética colorida que lo hizo accesible a públicos más diversos, especialmente a mujeres, quienes hasta entonces tenían escasa representación en los salones arcade.
Su impacto fue inmediato. A mediados de los años 80, Pac-Man ya se había convertido en el videojuego arcade más vendido del mundo, con más de 293 mil máquinas distribuidas globalmente, según datos del Libro Guinness de los Récords.
Para homenajear este aniversario tan especial, Bandai Namco —empresa desarrolladora del juego— ha preparado una serie de actividades y eventos bajo el lema “MAKE IMPACT”, que se extenderán durante 2025 y parte de 2026.
Pac-Man también se vuelve coleccionable
Como parte de los festejos, Bandai Namco lanza al mercado una nueva línea de productos para fanáticos de todas las edades:
- Un set de LEGO que recrea la clásica máquina arcade.
- Figuras coleccionables, peluches interactivos y accesorios para consolas como Nintendo Switch, Xbox y PlayStation, todos con diseño temático del personaje.
El legado del “comecocos”
En España, Pac-Man es conocido popularmente como el “comecocos”, nombre que refleja su esencia lúdica y su éxito inmediato entre el público hispanohablante. Pero sin importar el nombre o el país, lo cierto es que Pac-Man se convirtió en un ícono cultural: ha aparecido en películas, series, obras de arte y sigue presente en la memoria colectiva.
Cuarenta y cinco años después de su nacimiento, el simpático personaje amarillo no solo sigue vigente, sino que continúa uniendo generaciones a través del juego. Su legado va mucho más allá de los píxeles: representa un punto de encuentro entre nostalgia, innovación y cultura pop.