Estados Unidos, Los Ángeles.– Vecinos y activistas de Lancaster, en el condado de Los Ángeles, se manifestaron este miércoles para exigir justicia en torno al caso de Sheylla Gutiérrez, una inmigrante peruana de 33 años cuyo cuerpo fue hallado el pasado fin de semana en un sector del Bosque Nacional de Los Ángeles, tras haber sido reportada como no localizada el 12 de agosto por sus amigas.
La madre de tres niños había llegado desde Perú en 2023 buscando mejores oportunidades. No obstante, familiares y organizaciones comunitarias señalaron que vivía en un contexto de violencia doméstica que no denunció por temor a ser detenida debido a su situación migratoria. Este entorno, según quienes la conocían, marcó de manera decisiva sus últimos meses de vida.
El Departamento del Alguacil de Los Ángeles indicó que intensificó la búsqueda luego de revisar grabaciones de cámaras de seguridad donde se observa a su esposo, Jossimar Cabrera, de 36 años, trasladando un bulto envuelto en sábanas fuera del edificio donde residían en Lancaster. Poco después, brigadas de rescate encontraron material con características similares en un terraplén del bosque donde finalmente apareció el cuerpo.
La cronología familiar estableció que el 9 de agosto fue la última vez que se tuvo comunicación con Sheylla. Ese día, llamó a su madre, Helga Rosillo, para decirle que había decidido denunciar a Cabrera por supuestas agresiones físicas y psicológicas. La progenitora relató que durante esa conversación escuchó al esposo advertir: “No presentes una denuncia, me harás daño”.
Posteriormente, Cabrera viajó con sus tres hijos de 3, 7 y 9 años a Perú. Allí fue detenido por unas horas tras gestiones de los familiares de Gutiérrez y del Ministerio de la Mujer, que consideró el caso como un posible hecho de violencia de género. Sin embargo, las autoridades peruanas lo liberaron al no contar con pruebas concluyentes en su contra.
La liberación del principal sospechoso causó gran indignación entre los parientes de la víctima. Una de sus tías expresó que resulta incomprensible que continúe en libertad pese a los registros de video que, según la familia, evidencian su implicación en los hechos. El caso permanece bajo investigación mientras se mantienen los reclamos de justicia.
REDACCIÓN FV MEDIOS