Estas son las 3 plantas más tóxicas que debes evitar si tienes niños

0
335


Cuando se tienen niños en casa, es crucial estar informado sobre
el entorno que les rodea, incluyendo las plantas
ornamentales
que pueden parecer inofensivas pero resultar
ser peligrosas. Algunos hogares albergan plantas que, aunque
hermosas, contienen toxinas capaces de causar serios
problemas de salud a los más pequeños.

Potus (Epipremnum
aureum)

Conocida comúnmente como Potus o Pothos, el
Epipremnum aureum es una planta ornamental muy popular en muchos
hogares. Sin embargo, a pesar de su apariencia atractiva, es
importante estar consciente de sus peligros
potenciales
, especialmente si hay niños en casa.

El Potus es una
planta
de follaje que destaca por sus hojas en forma de
corazón, de un color verde vibrante con patrones variegados en
tonos dorados y blanco-crema. Es una planta
trepadora que puede crecer hasta 20 metros en su
hábitat natural, pero en interiores suele alcanzar entre 1
a 2 metros de longitud
. Es muy adaptable y puede prosperar
en condiciones de poca luz, lo que la hace una elección común para
la decoración de interiores.

Se trata de una planta originaria de las Islas de la Sociedad en
la Polinesia Francesa, pero se ha adaptado a diversos climas
alrededor del mundo. Debido a su resistencia y bajo
mantenimiento
, se encuentra frecuentemente en oficinas y
hogares.

Síntomas de intoxicación

Aunque es una planta muy popular, el Potus puede ser peligroso
si se ingiere o se entra en contacto con él. Es
importante conocer los síntomas de intoxicación para actuar
rápidamente:

Irritación oral y de garganta: si un niño
mastica o ingiere partes de la planta, puede experimentar una
sensación de ardor en la boca y en la garganta.

Náuseas y vómitos: la ingestión también puede
causar náuseas, vómitos y dolor abdominal.

Diarrea: similarmente, el consumo de Potus
puede llevar a episodios de diarrea.

Salivación excesiva: los niños pueden comenzar
a babear más de lo normal debido a la irritación oral.

Medidas de prevención

Para mantener a los niños seguros y evitar el contacto con el
Potus, es esencial seguir algunas medidas preventivas:

Ubicación estratégica: coloca la planta fuera
del alcance de los niños, preferiblemente en estantes altos o
colgantes.

Alternativas más seguras: considera sustituir
el Potus por otras plantas no tóxicas como las Marantas o las
Fittonias, que también son visualmente atractivas pero más
seguras.

Educación y vigilancia: enseña a los niños a no
tocar ni comer plantas desconocidas. Además, mantén un ojo
vigilante cuando estén cerca de estas plantas.

Uso de barreras: en casos donde mover la planta
no es una opción, se pueden usar barreras físicas como rejas o
coberturas para impedir el acceso de los niños.

Kalanchoe

La Kalanchoe es una suculenta originaria de
Madagascar, caracterizada por sus gruesas hojas
carnosas y flores vibrantes. Sus flores pueden ser de diversos
colores, incluyendo rojo, rosa, amarillo y blanco,
lo que la convierte en una planta muy atractiva para decorar
interiores y jardines. Esta planta es muy apreciada por su
resistencia y facilidad de cuidado, lo que la hace popular entre
los amantes de las plantas.

Riesgos y síntomas

A pesar de su belleza, la Kalanchoe es tóxica si se ingiere, y
los niños son especialmente vulnerables. Las partes tóxicas de la
planta contienen compuestos llamados
bufadienólidos, que pueden causar serios problemas
de salud.

Los síntomas de intoxicación incluyen:

Problemas gastrointestinales: náuseas, vómitos
y diarrea.

Síntomas cardíacos: arritmia, que es un ritmo
cardíaco irregular y potencialmente peligroso.

Letargo y debilidad: sensación de cansancio
extremo y falta de energía.

¿Cómo mantener a los niños seguros?

Para evitar cualquier riesgo de intoxicación por Kalanchoe, es
esencial seguir algunas medidas de seguridad:

Colocar fuera de su alcance: mantén la planta
en lugares elevados o colgantes donde los niños no puedan
alcanzarla.

Educación: enseña a los niños a no tocar ni
ingerir plantas.

Supervisión: monitorea a los niños cuando están
en áreas donde crece la Kalanchoe.

Alternativas seguras: considera reemplazar la
Kalanchoe con plantas no tóxicas como las Marantas o Fittonias.

Si se sospecha que un niño ha ingerido alguna parte de la
Kalanchoe, es crucial buscar atención médica inmediatamente.
Mantener estas plantas fuera del alcance de los niños ayudará a
prevenir posibles intoxicaciones y garantizará un
hogar seguro para todos.

Flor de Pascua
(Euphorbia pulcherrima)

La Flor de Pascua, también conocida como
Poinsettia, es una planta popularmente asociada
con la temporada navideña. Aunque su belleza la hace una adición
común en la decoración del hogar durante estas fiestas, es
importante estar consciente de su toxicidad,
especialmente si hay niños pequeños en casa.

La Flor de Pascua es conocida por sus
brillantes hojas rojas, aunque también existen variedades con
hojas rosadas, blancas y moteadas. Estas coloridas
«flores» en realidad no son flores, sino brácteas,
que son hojas modificadas. La verdadera flor es pequeña y amarilla,
ubicada en el centro de las brácteas.

Durante la temporada navideña, la Flor de Pascua se convierte en
una de las plantas más vendidas debido a su vibrante colorido que
aporta alegría y festividad. Es originaria de
México y crece como un arbusto en climas tropicales.

Efectos tóxicos

La Flor de Pascua tiene una reputación de ser tóxica, aunque
su nivel de toxicidad es moderado.

Irritación de la piel: el contacto con la savia
lechosa de la planta puede causar irritación y escozor en la piel.
En algunos casos, puede provocar sarpullidos.

Problemas digestivos: si un niño ingiere partes
de la planta, puede experimentar náuseas, vómitos y diarrea. Aunque
estos síntomas usualmente no son graves, pueden ser muy
incómodos.

Enrojecimiento y escozor en los ojos: el
contacto con los ojos puede resultar en enrojecimiento y escozor,
por lo que es importante manejar la planta con cuidado.

Te podría interesar:

Recomendaciones para el hogar

Si decides mantener una Flor de Pascua en casa durante la
Navidad, hay varias precauciones que puedes tomar para asegurar la
seguridad de tus hijos:

Ubicación fuera del alcance: coloca la planta
en lugares altos o colgantes donde los niños no puedan alcanzarla.
Evita colocarla en mesas bajas o en el suelo.

Supervisión constante: vigila a los niños
pequeños cuando están cerca de la planta. Asegúrate de que no
intenten tocarla ni llevarse partes de ella a la boca.

Educación temprana: enseña a tus hijos desde
pequeños que no deben tocar ni ingerir plantas desconocidas.
Explica que algunas plantas pueden ser peligrosas.

Lavado inmediato: si ocurre contacto con la
piel, lava la zona afectada con agua y jabón para reducir la
irritación. Si la savia entra en contacto con los ojos, enjuágalos
con abundante agua.

Alternativas seguras: considera decorar con
plantas no tóxicas durante la temporada festiva. Existen muchas
opciones hermosas que no representan un riesgo para los niños.

Foto Freepik

¿Qué hacer en caso
de intoxicación?

Si sospechas que un niño ha entrado en contacto con una planta
tóxica, actuar rápido y de manera eficiente puede
marcar la diferencia. Aquí te presentamos una guía clara y fácil de
seguir para manejar estos casos.

Primeros auxilios básicos

En caso de intoxicación por plantas, es esencial conocer los
pasos iniciales para minimizar los efectos
tóxicos
. Aquí te decimos qué hacer dependiendo del tipo de
exposición:

Contacto con la piel:

Enjuagar inmediatamente: lava la piel afectada
con abundante agua y jabón durante al menos 15 minutos.

Retirar la ropa contaminada: cambia la ropa del
niño para evitar una exposición prolongada.

Aplicar crema suave: si se observa irritación,
aplica una crema hidratante para aliviar la piel.

Ingestión:

Retirar restos de la boca: si el niño todavía
tiene partes de la planta en la boca, haz que las escupa y enjuaga
su boca con agua.

No inducir el vómito: no intentes provocar el
vómito sin la indicación de un profesional de salud, ya que algunos
compuestos tóxicos pueden causar más daño al ser devueltos.

Ofrecer agua o leche: si no hay síntomas
severos como vómitos o dificultad para respirar, darle un vaso de
leche o agua puede ayudar a diluir la toxina.

Contacto con los ojos:

Enjuagar con agua tibia: lava los ojos del niño
con agua tibia durante al menos 15 minutos.

Evitar que se frote los ojos: esto puede
empeorar la irritación.

¿Cuándo buscar ayuda médica?

No todos los casos de contacto con
plantas tóxicas
requieren una visita a urgencias, pero es
fundamental reconocer las señales que indican la necesidad de
atención médica inmediata:

Señales de alerta:

Dificultad para respirar: si el niño muestra
signos de asfixia o respiración dificultosa, busca ayuda médica de
forma urgente.

Vómitos persistentes: si el niño no puede dejar
de vomitar, podría necesitar atención profesional.

Dolor abdominal severo: dolor intenso o
persistente en el abdomen es una señal de que algo no está
bien.

Desmayo o convulsiones: estos son síntomas
graves que requieren atención inmediata.

A qué servicios acudir:

Centro de control de intoxicaciones: llama al
número del Centro de Control de Intoxicaciones más cercano para
recibir instrucciones específicas y rápidas.

Sala de emergencias: si los síntomas son
severos o si el Centro de Control de Intoxicaciones recomienda una
visita, acude inmediatamente a la sala de emergencias.

Pediatra de confianza: para síntomas leves o si
tienes dudas, puedes contactar a tu pediatra para que te oriente
sobre los pasos a seguir.

4.5/5 – (4
votos) ¿Le resultó útil este artículo?

Dany Levito
Últimas entradas de Dany Levito (ver
todo
)



Source link