Los antidepresivos son medicamentos que se utilizan para tratar la depresión y mejorar el estado de ánimo de las personas. Sin embargo, uno de los efectos secundarios de estos medicamentos es la disminución del deseo sexual. Si te encuentras en esta situación, no estás solo.
Antidepresivos y el deseo sexual
Cuando se toman antidepresivos, es normal experimentar una serie de efectos positivos, como un mejor estado de ánimo y una mayor sensación de bienestar. Sin embargo, también es común que estos medicamentos disminuyan el deseo sexual. De acuerdo con expertos, existe una conexión entre la depresión y el deseo sexual. Las personas que sufren de depresión activa tienden a tener una disminución del interés en el sexo.
La depresión puede disminuir el interés en el sexo, causar problemas de excitación y dificultades para la intimidad. Tanto la condición en sí misma como la angustia que causa pueden tener un impacto negativo en la función sexual.
Cómo los antidepresivos afectan nuestro cuerpo
Cuando se comienza a tomar un antidepresivo, es posible que notes que te resulta más difícil alcanzar el orgasmo, lo que se conoce como el «orgasmo de los antidepresivos». Incluso si no tienes relaciones sexuales, es normal experimentar una disminución del deseo sexual.
Qué hacer si sientes que los antidepresivos afectan tu vida sexual
Si sientes que los antidepresivos están afectando tu vida sexual, lo primero que debes hacer es comunicarte con tu médico. Ellos pueden hacer ajustes en la medicación o explorar otras opciones para mitigar los efectos secundarios sexuales. La comunicación abierta con tu médico es fundamental para encontrar una solución adecuada para ti.
Además de hablar con tu médico, adoptar un estilo de vida saludable puede tener un impacto significativo en tu deseo sexual mientras tomas antidepresivos. El ejercicio regular, la práctica de técnicas de reducción del estrés y una dieta nutritiva pueden ayudar a aumentar tu libido.
La terapia psicológica, como la terapia cognitivo-conductual o la terapia sexual, también puede ser efectiva para abordar los problemas sexuales relacionados con los antidepresivos. Estos enfoques colaborativos promueven soluciones más integrales para el problema. Al discutir abiertamente tus preocupaciones con un terapeuta, puedes trabajar en estrategias para manejar los efectos secundarios sexuales mientras continúas con tu tratamiento antidepresivo.
Cómo aumentar el deseo sexual mientras tomas antidepresivos
Según los expertos, puedes incluir ajustes en la medicación y cambios en el estilo de vida, como priorizar el autocuidado y la reducción del estrés. Sin embargo, una de las formas más impactantes de aumentar el deseo sexual mientras tomas antidepresivos es a través de una comunicación abierta y honesta con tu pareja.
Muchas personas encuentran que al discutir sus sentimientos y experiencias con su pareja, pueden fortalecer su vínculo emocional y mejorar su vida íntima mientras toman antidepresivos. Aunque puede resultar frustrante, es importante tener empatía, darse tiempo y no forzar las cosas.
Además, es recomendable tomarte tiempo para ti mismo en el ámbito sexual. Puede ser útil programar tiempo en tu día para la masturbación y el auto-placer. Cuanto más lo hagas, más tu cuerpo y tu cerebro reconocerán las sustancias químicas que te hacen sentir bien y tal vez las deseen con el tiempo. Así que busca tu juguete sexual favorito, disfruta de un tiempo a solas y observa qué sucede.
Cómo hablar sobre los antidepresivos y el deseo sexual con tu pareja
Si estás lidiando con los antidepresivos y la disminución del deseo sexual, es importante hablarlo con tu pareja. Aquí te ofrecemos algunas sugerencias para abordar el tema:
Tener una conversación reflexiva: escoge un lugar adecuado y privado donde ambos se sientan cómodos. Sé abierto y honesto acerca de tus preocupaciones y sentimientos, al mismo tiempo que escuchas empáticamente la perspectiva de tu pareja.
Abordar el problema como un equipo: recuerda que mientras tú estás lidiando con la disminución del deseo sexual, tu pareja también puede estar enfrentando dificultades. Es mejor abordar este problema como un equipo y enfrentarlo juntos. Explora soluciones para mantener la intimidad y la conexión emocional a pesar de los desafíos que plantean los antidepresivos.
Practicar la paciencia: la paciencia puede ser clave en la batalla entre los antidepresivos y el deseo sexual. Al practicar la paciencia y la compasión en ambos lados, puedes fortalecer tu vínculo y facilitar la búsqueda de soluciones que funcionen para ambos.
Recordar el objetivo: recuerda que el manejo de la depresión es el objetivo principal y que los efectos en la función sexual son una preocupación común. La comunicación abierta, tanto con tu proveedor de atención médica como con tu pareja, puede conducir a soluciones constructivas.