Cuando pensamos en tener un orgasmo, lo último en lo que nos
imaginamos es en estar en un gimnasio. Sin
embargo, tener un orgasmo mientras haces ejercicio no solo es
posible, sino que es más común de lo que se
piensa, y a este fenómeno se le conoce como
«coregasmo».
¿Qué es el
«coregasmo»?
El «coregasmo» es el término utilizado para
describir el orgasmo que algunas mujeres
experimentan durante el ejercicio físico. Aunque pueda sonar
extraño, este tipo de orgasmo puede ocurrir incluso sin
ningún tipo de contexto erótico. Para entender mejor el
«coregasmo», es importante comprender cómo funciona el orgasmo
femenino.
El orgasmo femenino se produce gracias a la
estimulación de los músculos del suelo pélvico y el clítoris. El
clítoris funciona como un disparador para el orgasmo, ya que este
solo ocurre debido a la contracción de estos músculos. Durante el
ejercicio físico, especialmente aquellos que implican la activación
de la musculatura del «core» (como los abdominales, los oblicuos,
los lumbares y los glúteos), se produce una estimulación
fisiológica que puede desencadenar el orgasmo.
Un estudio realizado por científicos de la Universidad
de Indiana en Estados Unidos encontró que más de un tercio
de las 370 mujeres entrevistadas, con edades comprendidas entre los
18 y 63 años, habían experimentado un «coregasmo». Además, el 60%
de las mujeres encuestadas afirmaron haber experimentado placer
sexual durante el ejercicio físico.
Factores
que influyen en el «coregasmo»
El «coregasmo» puede ser
influenciado por varios factores, incluyendo la estimulación de los
músculos del «core» y la liberación de hormonas durante el
ejercicio. Durante la actividad física, el cuerpo produce
endorfinas y serotonina, sustancias que pueden facilitar
la estimulación fisiológica y la experiencia de orgasmo.
Además, la musculatura del suelo pélvico y del
«core» juega un papel importante en la activación del
«coregasmo». Estos músculos estabilizan la bacia, la pelvis y el
abdomen, y su contracción puede generar sensaciones placenteras y
orgasmos no genitales pero profundamente satisfactorios.
Experiencias
personales y testimonios
Muchas mujeres han compartido sus experiencias
personales de «coregasmo» durante la práctica de ejercicio
físico, las cuales respaldan las investigaciones científicas que
demuestran que es una realidad. Por esa razón, cada vez más mujeres
están hablando abiertamente sobre este fenómeno y
compartiendo sus experiencias, lo que contribuye a su
reconocimiento y normalización dentro de la sociedad.
Beneficios del
«coregasmo»
Además de proporcionar placer y satisfacción
sexual, el «coregasmo» puede tener beneficios para la
salud. Durante el orgasmo, el cuerpo libera
endorfinas, que actúan como analgésicos
naturales y pueden ayudar a aliviar el estrés, mejorar el
estado de ánimo y promover una sensación general de bienestar.
El ejercicio físico en sí mismo también tiene numerosos
beneficios para la salud, como la mejora de la condición
cardiovascular, el fortalecimiento de los músculos y la
prevención de enfermedades. Si el «coregasmo» puede ser una
motivación adicional para que las mujeres se
mantengan activas y realicen ejercicio regularmente, esto puede
tener un impacto positivo en su bienestar físico y emocional.
Es importante destacar que cada mujer puede experimentar el
«coregasmo» de manera diferente. Algunas pueden tener
orgasmos más intensos durante el ejercicio físico,
mientras que otras pueden no experimentarlos en absoluto. Como
ocurre con cualquier experiencia sexual, es importante escuchar y
respetar los límites y preferencias individuales de cada
persona.
(ver todo)