Los alimentos enlatados han sido una opción popular durante décadas, especialmente por su conveniencia y durabilidad. Sin embargo, existe una creencia generalizada de que los alimentos frescos son siempre la opción más saludable. Aunque esto puede ser cierto en muchos casos, hay ciertos alimentos que en realidad son más saludables cuando se consumen enlatados.
La importancia de las frutas y verduras en nuestra dieta
Las frutas y verduras son una excelente fuente de fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes que nuestro cuerpo necesita para funcionar de manera óptima. Consumir al menos cinco porciones de frutas y verduras al día puede ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares, mantener un peso saludable y proporcionar nutrientes esenciales para nuestro cuerpo.
Alimentos enlatados: una alternativa saludable y conveniente
Si bien se ha promovido la idea de que los alimentos frescos son siempre la opción más saludable, hay ciertos alimentos que en realidad son más nutritivos cuando se consumen enlatados, como es el caso del tomate enlatado, los cuales contienen más licopeno, un antioxidante que ayuda a proteger contra el envejecimiento celular y la aparición de ciertos tipos de cáncer, en comparación con los tomates frescos. Además, los tomates enlatados contienen más calcio y hierro debido al proceso de cocción que ablanda las paredes celulares de las plantas, facilitando la absorción de nutrientes.
Otro alimento enlatado que puede ser más saludable que su contraparte fresca son los arándanos, que contienen más vitaminas y polifenoles en comparación con los frescos, debido al proceso de congelación que ralentiza la pérdida de nutrientes. De manera similar, los guisantes enlatados contienen niveles más altos de vitamina B y E en comparación con los frescos, mientras que los espinacas congeladas son más ricas en hierro que las espinacas frescas.
Beneficios de los alimentos enlatados
A continuación, te presentamos algunos de los beneficios de consumir alimentos enlatados:
- Mayor disponibilidad durante todo el año: los alimentos enlatados están disponibles durante todo el año, lo que significa que podemos disfrutar de nuestras frutas y verduras favoritas incluso cuando están fuera de temporada. Esto nos permite mantener una dieta equilibrada y obtener los nutrientes esenciales en cualquier momento.
- Mayor durabilidad: los alimentos enlatados tienen una vida útil más larga en comparación con los alimentos frescos, lo que los convierte en una opción conveniente para aquellos que desean tener alimentos saludables disponibles en cualquier momento. Además, no se desperdician fácilmente y se pueden almacenar durante largos períodos sin perder su valor nutricional.
- Mayor retención de nutrientes: contrariamente a la creencia popular, los alimentos enlatados pueden retener una cantidad significativa de nutrientes. Los alimentos enlatados se procesan rápidamente después de la cosecha, lo que ayuda a preservar sus nutrientes. Además, el proceso de cocción de los alimentos enlatados facilita la absorción de nutrientes por parte de nuestro cuerpo.
- Menor costo: en general, los alimentos enlatados suelen ser más económicos que los alimentos frescos, especialmente si se trata de alimentos fuera de temporada. Esto puede ser beneficioso para aquellos que tienen un presupuesto limitado pero aún desean consumir alimentos saludables.
Cómo incorporar alimentos enlatados en una dieta equilibrada
Si bien los alimentos enlatados pueden ser una opción más saludable y conveniente en ciertos casos, es importante recordar que no deben reemplazar por completo los alimentos frescos en nuestra dieta. La variedad es clave para obtener todos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita. Aquí hay algunas formas de incorporar alimentos enlatados en una dieta equilibrada:
- Alternar entre alimentos frescos y enlatados: para obtener todos los nutrientes que necesitamos, es recomendable alternar entre alimentos frescos y enlatados. Por ejemplo, puedes disfrutar de tomates frescos en verano y cambiar a tomates enlatados en invierno. De esta manera, obtendrás una amplia gama de nutrientes y sabores durante todo el año.
- Leer las etiquetas: al comprar alimentos enlatados, es importante leer las etiquetas para asegurarse de que no contengan aditivos no deseados, como azúcares añadidos o altos niveles de sodio. Opta por alimentos enlatados que sean bajos en sodio y sin azúcares añadidos.
- Enjuagar los alimentos enlatados: si estás preocupado por el contenido de sodio de los alimentos enlatados, puedes enjuagarlos con agua antes de consumirlos. Esto ayudará a reducir el contenido de sodio en los alimentos enlatados.
- Combinar alimentos enlatados con alimentos frescos: una forma de obtener una amplia variedad de nutrientes es combinar alimentos enlatados con alimentos frescos. Por ejemplo, puedes agregar tomates enlatados a una ensalada de hojas verdes frescas para obtener una combinación de sabores y nutrientes.