Los Rayados de Monterrey cobraron revancha de la dolorosa eliminación en las semifinales del torneo Clausura 2023 que le costó el puesto al técnico Víctor Manuel Vucetich al vencer en duelo de polémico arbitraje a los Tigres de la UANL por 1-2 y así poner un pie en la etapa de semifinales del actual certamen Clausura 2024.
La realidad es que a diferencia del clásico de la jornada 15 en donde se registró un espectacular empate 3-3 en el estadio BBVA, ahora en el estadio Universitario los dos equipos quisieron resolver las acciones acudiendo a un estilo más conservador y donde Monterrey sacó la mejor parte con la victoria por diferencia de un gol.
La victoria del Monterrey baja un poco la presión sobre la continuidad del técnico argentino Fernando Ortiz en el banquillo de los Rayados, cuya continuidad depende de la eliminación de su acérrimo rival en esta eliminatoria y que ha puesto en bandeja de plata para que el llamado “Tano” deje atrás su mala suerte de cuatro eliminaciones en series finales, tres con América y una con el cuadro de la Sultana del Norte.
Con goles del español Sergio Canales y el argentino Maximiliano Meza, el Monterrey resolvió un duelo bravo en donde la escuadra felina respondió por conducto de Diego Lainez, en una contienda que estuvo inmersa en la polémica por dos jugadas que habrían cambiado el curso del encuentro si el silbante Marco Antonio Ortiz se hubiera atrevido a marcarlas como penalti o por lo menos acudir al VAR, pero las terminó ignorando, con lo cual avivó la llama de la polémica.
Primero, el defensa Samir Caetano de Souza cometió unas manos claras, pero que el árbitro Marco Antonio Ortiz juzgó como accidental la jugada, cuando el toque del balón con la extremidad del jugador brasileño movió el curso del esférico y que en otras ocasiones se ha marcado como pena máxima, pero que ahora ni siquiera ameritó que el silbante revisara la jugada en el VAR.
Segundo, cuando Diego Lainez, motivado por su golazo que puso el 1-1 transitorio en el encuentro, llegó al área y ahí fue derribado por una fea barrida del argentino Jorge Rodríguez dentro del área, siendo ignorada por el silbante, cuando la acción había sido digna de un round de lucha libre.
Estos factores hicieron que el encuentro se envolviera en una tensión constante y que ambos equipos, en lugar de brindarse en la cancha, quisieron ganar el partido por medio de la fuerza, tratando de imponer su personalidad y donde Monterrey dio el segundo golpe con el gol de Maximiliano Meza en el minuto 48 de tiempo corrido.
La polémica y tensión de las acciones se vieron reflejadas cuando Antonio Leone y Javier Aquino se trenzaron en un enfrenamiento que estuvo a punto de derivar en una bronca de alto nivel, sobre todo por los empujones que provocaron que las bancas se vaciaran.
Al final la sangre no llegó al río, pero dejó todo listo para que el duelo del domingo a partir de las 21 horas, Monterrey pueda mantener el control de la eliminatoria o que Tigres saque la casta y le dé la vuelta a la liguilla para avanzar a semifinales.
De esta forma, en la edición 117 del clásico regiomontano logró su victoria número 40 por 41 de los felinos, lo cual cierra la brecha en la ventaja que tenían los Tigres de la UANL en la historia de esta rivalidad en el norte del país.
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