Altagracia Salazar
La suspensión de la licitación para el pasaporte electrónico se realizó a petición de la misma dirección de Pasaportes cuyo liderazgo actual no fue quien convocó el acto que hoy quema las manos.
La licitación en sí misma era un maco y carecía de razón porque nuestras fuentes indican que el gobierno dominicano recibió ofertas de dos gobiernos para la producción del citado documento y en el caso de optarse por una de esas posibilidades, ambas de gran credibilidad y amplia experiencia, la licitación era innecesaria.
Esto es así porque las contrataciones de Estado a Estado se negocian de manera directa, por acuerdos y convenciones que excluyen la licitación y/o el concurso.
Hay que ser pechú para rechazar la ejecución directa de un contrato con la Real Casa de la Moneda o con la firma que imprime el Euro. Pero aquí es posible y los protagonistas estarían montados en la famosa alianza público privada.
Solo eso explica el desistimiento de 23 oferentes y la decisión de pedir la intervención de la dirección de Compras y Contrataciones para suspender provisionalmente la licitación.
Además de que se hace evidente que el huevo andaba buscando sal y que, dígase o no, se gestionó crear las condiciones para que alguien se llevará una bicoca de 6 mil millones, está la cruda realidad de que el entuerto nos aleja de la posibilidad de obtener el mentado pasaporte electrónico y con eso el inicio del diálogo para la exención de la vida schengen.
Una entendida me hacía la observación de la precariedad del documento físico actual que carece de arte siendo que el arte en los pasaportes es parte integral de la seguridad. Los ciudadanos de a pie no tienen que saben que las flores y los pajaritos que aparecen en bajo relieve en las libretas de pasaportes del mundo son parte de la seguridad y el nuestro ahora no tiene ni ciguas.
Se anunció que en enero tendremos el nuevo documento pero ya no será así.
Técnicamente no pasó nada, o no lo dejaron pasar. La verdad monda y lironda es que se cayó un negocio que no sabemos de quien es o si todavía insistirán en hacerlo.