Un hombre que estaba en el corredor de la muerte en Alabama, luego de ser sentenciado a la pena capital por el asesinato de cinco personas, recibió la inyección letal en la prisión de Holman. El acusado retiró sus apelaciones este año y pidió ser ejecutado.
Derrick Dearman, de 36 años, fue declarado muerto a las 6:14 de la tarde del jueves 17 de octubre, en la prisión de Holman, en el sur de Alabama. Atado a una camilla, Dearman le pidió perdón a los familiares de las víctimas que estuvieron en la sala para presenciar la ejecución.
“Perdónenme… Esto no es para mí, esto es para ustedes”, fueron las palabras que dijo Dearman a las familias de las víctimas. “He soportado tanto”.
“Los amo”, sus últimas palabras”
En la sala, también se encontraba su familia, a quien les dedicó sus últimas palabras: “Ustedes ya saben que los amo”. Informó The Associated Press (AP). Cuando se cerraron las cortinas, su padre sollozó y gritó repetidamente el nombre de su hijo.
Derrick Dearman se declaró culpable de los cargos y pidió que retiraran sus apelaciones, solicitando su ejecución. “Soy culpable”, según escribió en una carta dirigida al juez en abril.
Los abogados de Dearman argumentaron que el abogado que lo defendió durante el juicio, no hizo lo suficiente para demostrar su enfermedad mental y “falta de competencia para declararse culpable”, compartió AP.
Sufría de trastorno bipolar psicótico
La Iniciativa de Justicia Igualitaria representó a Dearman en la apelación, quienes confirmaron que “sufría de una enfermedad mental grave y de por vida, incluido el trastorno bipolar con características psicóticas”. Y agregraron que fue ejecutado “a pesar de la evidencia de que sufre una enfermedad mental grave”.
¿Cuándo cometió el crimen? El 19 de agosto de 2016, el hermano de la novia de Derrick Dearman, la llevó a su casa después de que él comenzara a abusar de ella, según la orden de sentencia de un juez.
Después se presentó en el domicilio varias veces durante la noche, pero le dijeron que se fuera, ya que no podía quedarse en el lugar.
Alrededor de las 3:00 de la madrugada, Dearman regresó, todas las víctimas estaban dormidas, según la orden de sentencia de un juez. Atacó a cada una de las víctimas con un hacha que tomó del jardín y luego con un arma que se encontró en la casa, dijeron los fiscales.
Una mujer embarazada entre las víctimas
Después de matarlos, obligó a su novia a subirse al auto con él y conducir hasta Mississippi. Las víctimas fueron identificadas como Shannon Melissa Randall, de 35 años; Joseph Adam Turner, de 26; Robert Lee Brown, de 26; Justin Kaleb Reed, de 23; y Chelsea Randall Reed, de 22. Chelsea y Justin Reed estaban casados y esperaban un bebé.
Dearman fue arrestado y mientras lo escoltaban a la cárcel, culpó a las drogas del accidente, según reconoció que estaba drogado con metanfetamina. “Las drogas me hacían pensar en cosas que realmente no estaban sucediendo”, dijo cuando fue detenido.
Dearman inicialmente se declaró inocente, pero cambió su declaración a culpable después de despedir a sus abogados.
A finales de septiembre, Alan Eugene Miller, de 59 años, fue ejecutado con gas nitrógeno en una prisión en Alabama, siendo esta la segunda que realizan con este método, que ha sido calificado de “agonizante y doloroso” por Naciones Unidas.
Jueza en Texas detiene ejecución
La ejecución de Derrick Dearman fue una de las dos previstas para el jueves 17 de octubre en Estados Unidos. En Texas, Robert Roberson, quien es la primera persona condenada a muerte por asesinato relacionada con el síndrome del bebé sacudido, por la muerte en 2002 de su hija de dos años.
Faltando dos horas para la ejecución, un juez concedió una petición de última hora de los legisladores estatales para retrasar el procedimiento. Sus abogados, así como un grupo de legisladores texanos y el principal investigador policial de la muerte de su hija, afirman que el caso se basó en pruebas “defectuosas” y que Roberson, supuestamente es inocente.
Con información de AP
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