Cada tercer sábado de junio se celebra a uno de los oficios artísticos más antiguos del mundo, el Día Mundial de los Malabares se creó para conmemorar el aniversario de la fundación de la Asociación Internacional de Malabaristas.
Esta efeméride busca promover los beneficios del malabarismo, que consiste en la capacidad de manipular con destreza a numerosos objetos (anillos, bolas, diábolos, antorchas y mazas), lanzándolos en el aire y manteniéndolos en equilibrio.
El término malabarista proviene de una región ubicada al sur de La India llamada Malabar. Allí sus habitantes tenían habilidades de lanzar objetos al aire, al tiempo que entretenían a las personas.
El malabarismo favorece el desarrollo de destrezas cognitivas: la coordinación, la visión espacial, la atención y la concentración.
Según datos históricos, se cree que en Egipto, durante el periodo entre 1794 y 1781 a. C., las mujeres practicaban malabarismo.
De acuerdo a estudios e investigaciones de la Universidad de Oxford, hacer malabarismos incrementa un 5% la parte del cerebro que contiene las fibras. Estas transmiten impulsos eléctricos de una neurona a otra. Los juegos de malabarismo ejercitan la conectividad del cerebro.
La Asociación Internacional de Malabaristas o International Jugglers Association (IJA), es una organización sin fines de lucro, creada el 17 de junio de 1947. Su misión principal es la de dar asistencia a los malabaristas de todo el mundo.
Entre sus principales actividades se destacan: organizar el Festival Anual de la Asociación, efectuar competiciones regionales y dirigir la Academia de Malabares para Jóvenes.
