Las proteínas son un macronutriente esencial para nuestro cuerpo y son fundamentales para la creación y reparación de las células, así como para el crecimiento y desarrollo adecuados. Si no consumimos suficientes proteínas en nuestra dieta, podemos experimentar una deficiencia nutricional que puede tener diversos efectos en nuestra salud.
¿Qué sucede cuando consumes pocas proteínas?
Cuando no consumes la cantidad suficiente de proteínas, tu cuerpo puede experimentar una serie de efectos negativos. Las proteínas son vitales para el buen funcionamiento de tus células, tejidos y órganos. Si te falta este macronutriente, puedes experimentar los siguientes síntomas:
1. Deseo constante de consumir proteínas
Uno de los primeros signos de una deficiencia de proteínas es sentir un deseo constante de consumir alimentos ricos en proteínas. Tu cuerpo está tratando de decirte que necesita más proteínas para funcionar correctamente. Si sientes antojos de alimentos como pollo, pescado, huevos o legumbres, es importante escuchar a tu cuerpo y proporcionarle la cantidad adecuada de proteínas.
2. Antojos de azúcar
Las proteínas son digeridas más lentamente que los carbohidratos. Si consumes una comida compuesta principalmente por carbohidratos y no incluyes suficientes proteínas, tu nivel de azúcar en la sangre aumentará rápidamente y luego disminuirá bruscamente. Este ciclo de altibajos en los niveles de azúcar en la sangre puede hacer que sientas más antojos de alimentos dulces.
3. Sensación constante de hambre
Es posible que hayas notado que te sientes más hambriento durante el día cuando no consumes suficientes proteínas en tus comidas. Esto se debe a que las proteínas reducen los niveles de la hormona del hambre, la grelina, y estimulan la producción de otras hormonas que te hacen sentir saciedad. Como resultado, no consumir suficientes proteínas puede aumentar tu apetito y hacer que comas más.
4. Hígado graso
El hígado graso ocurre cuando se acumulan depósitos de grasa en las células del hígado. Esta condición es un síntoma de una forma grave de malnutrición proteica llamada kwashiorkor, que generalmente afecta a bebés y niños en áreas pobres del mundo. Si no se trata adecuadamente con la ayuda de un médico, puede llevar a la esteatosis hepática no alcohólica.
5. Edema
El edema puede ser causado por bajos niveles de una sustancia llamada albúmina, que ayuda a mantener los líquidos dentro de los vasos sanguíneos. La falta de albúmina puede dificultar el equilibrio de líquidos en el cuerpo, lo que lleva a la retención de agua y sodio, causando hinchazón.
6. Cambios en la piel y el cabello
Las proteínas son componentes importantes de la piel y el cabello. Por lo tanto, una deficiencia de proteínas puede afectar considerablemente la salud de la piel y el cabello. La piel puede volverse más pálida, seca y escamosa, mientras que el cabello puede volverse frágil y quebradizo. También puedes experimentar pérdida de cabello o aparición prematura de canas.
7. Mayor susceptibilidad a enfermarse
Una deficiencia grave de proteínas puede comprometer el sistema inmunológico, puesto que ayudan a producir anticuerpos que protegen contra infecciones y otras enfermedades. La falta de proteínas puede llevar a una menor producción de anticuerpos, lo que aumenta el riesgo de desarrollar infecciones.
8. Pérdida y debilidad muscular
Consumir cantidades adecuadas de proteínas puede ayudar a construir y mantener la masa y fuerza muscular. Por otro lado, no consumir suficientes proteínas puede hacer que tus músculos se vuelvan menos tonificados y, en casos graves, pueden provocar atrofia muscular.
9. Disminución del desarrollo y densidad ósea
Tus huesos están compuestos principalmente de una proteína llamada colágeno. Por lo tanto, una deficiencia de proteínas puede reducir la masa muscular y ósea, lo que puede hacer que te sientas cansado y débil. Las proteínas provenientes de alimentos ricos en calcio son necesarias para el crecimiento óseo, especialmente en niños pequeños. También son importantes para mantener la salud ósea en adultos mayores que tienen riesgo de osteoporosis, una condición que causa huesos frágiles y propensos a fracturas.
10. Crecimiento lento
Las proteínas son esenciales para el crecimiento, como mencionamos anteriormente. La falta de proteínas puede provocar un estancamiento en el crecimiento o un desarrollo lento, especialmente en niños que no reciben suficientes proteínas.
11. Aumento de peso
Las proteínas suelen brindar una mayor sensación de saciedad en comparación con los carbohidratos, lo que significa que te sentirás lleno durante períodos de tiempo más largos después de consumir proteínas. Como resultado, consumir más proteínas puede llevar a un menor consumo total de calorías.
12. Anemia
La anemia es una condición en la que tu cuerpo tiene una cantidad reducida de glóbulos rojos o hemoglobina, la proteína que ayuda a los glóbulos rojos a transportar oxígeno desde los pulmones al resto del cuerpo. Tu cuerpo necesita hierro para producir glóbulos rojos ricos en oxígeno.
Es importante destacar que estos signos pueden variar en gravedad y pueden estar relacionados con otras condiciones de salud. Si experimentas alguno de estos signos o tienes preocupaciones acerca de tu ingesta de proteínas, es recomendable que consultes a un profesional de la salud.
Recuerda que la información proporcionada en este artículo tiene como objetivo complementar, pero no reemplazar, la relación entre un paciente y su médico. El objetivo de este artículo es promover un bienestar diario y sostenible, brindando información y reflexiones sobre temas relacionados con la salud, el bienestar y el medio ambiente.
¡Cuida de tu cuerpo y asegúrate de consumir suficientes proteínas para mantenerlo en óptimas condiciones!