#Deportes: Verstappen empujó a Alonso hacia otro milagro #F1

En la Fórmula 1 actual, donde cada milésima cuenta y nadie regala nada, ver un gesto de respeto entre dos campeones con alma de leyenda es algo que estremece. Y eso fue lo que ocurrió este viernes en la clasificación Sprint del Gran Premio de Miami, en una imagen que muchos pasaron por alto en directo, pero que ha acabado siendo uno de los grandes momentos del día: Max Verstappen dándole rebufo a Fernando Alonso en plena SQ2. Un rebufo que, visto lo visto, pudo marcar la diferencia entre quedar fuera o pasar a la SQ3.

Alonso, con un Aston Martin que este 2025 está lejos de ser competitivo —más cerca del fondo de la parrilla que de las posiciones nobles—, logró una décima posición que sabe a oro. El coche verde no está para milagros, pero Fernando los sigue haciendo. Y esta vez, tuvo una pequeña ayuda de alguien que entiende perfectamente lo que significa sacar el 110% de un monoplaza que no está a la altura: Verstappen.

El neerlandés, que tampoco disfruta ya del mejor coche de la parrilla, se encontró con Alonso en la contrarrecta del circuito de Miami. Lo normal en estas situaciones habría sido apartarse para no ofrecer rebufo a un rival. Pero Max no lo hizo. Mantuvo su trazada, consciente de que Fernando venía por detrás, y le dio un impulso decisivo. Un gesto que no parece pactado, pero sí absolutamente intencionado.

El resultado: Alonso entró a SQ3. Décimo, sí, pero dentro. Y lo primero que hizo al bajarse del coche fue buscar a Verstappen en el parque cerrado. Le dio las gracias, hablaron, se sonrieron, y el respeto mutuo volvió a quedar patente. Incluso algunas cámaras captaron el momento, aunque no se le diera el protagonismo que merecía en las retransmisiones.

Dos pilotos muy parecidos

Una muestra de compañerismo, de complicidad, de admiración mutua entre dos pilotos que se han elogiado públicamente más de una vez, y que sueñan con compartir volante algún día en Le Mans u otra carrera de resistencia. Dos campeones que se entienden. Que hablan el mismo idioma. Que saben lo que significa remar contracorriente.

Verstappen, con un Red Bull que ya no es dominante como antaño, sigue peleando de tú a tú con los McLaren, que ahora marcan el ritmo. Y aún así, se permite gestos como el de hoy. Alonso, por su parte, continúa su cruzada contra el tiempo y las limitaciones mecánicas. Juntos protagonizaron un momento que va mucho más allá de una simple clasificación Sprint: fue una declaración de respeto, de deportividad, y de pura pasión por correr.

Este sábado, sólo los ocho primeros sumarán puntos en el Sprint. Alonso saldrá décimo, pero con la motivación por las nubes y, sobre todo, con la certeza de que aún hay cosas que el cronómetro no puede medir.