Red Bull es un equipo en el que hay que esforzarse por sacar rendimiento a un coche difícil, especialmente cuando tu ilustre compañero de equipo parece estar manejándolo a su gusto. La percepción lo es todo en la Fórmula 1, y las tablas de tiempos sugieren que Max Verstappen lo está haciendo parecer fácil.
Obviamente, la imagen es diferente desde la pista, donde el neerlandés está desplegando cada pizca de su talento para mantener el RB21 apuntando en la dirección correcta, pero matices como ese no cuentan para nada cuando los pilotos de una escudería están en extremos opuestos de la parrilla. Naturalmente, el de atrás acabará cargando con el peso de la responsabilidad, y se le pedirá que trabaje más duro.
En las inmortales palabras de Sir Patrick Head a Antonio Pizzonia en la radio de Williams en 2005: “Hagas lo que hagas, hazlo mejor”.
Se trata del mismo piloto del que el responsable de Manor, John Booth, comentó una vez: “Manejado adecuadamente, Pizzonia podría haber sido campeón del mundo”.
Cuando Liam Lawson consiguió ascender para ser el compañero de Max Verstappen en lugar de Yuki Tsunoda, los dirigentes de Red Bull citaron la fortaleza mental del neozelandés como el factor decisivo para tomar esa decisión, y la necesitará después de otro miserable día en la oficina en el Gran Premio de China 2025 de Fórmula 1.
Comenzó en la parte trasera de la parrilla en la carrera al sprint después de ser eliminado en la primera ronda de la sprint shootout. Aunque progresó al inicio, su carrera hacia delante cesó cuando alcanzó la parte trasera de Isack Hadjar y no pasó de ahí, seis plazas por encima, mientras que el vigente campeón del mundo era tercero.
Más tarde, en la clasificación para el domingo, quedó expuesto al no poder marcar una primera vuelta rápida lo suficientemente buena, y después tuvo tráfico en forma de Pierre Gasly en su última oportunidad de dar une vuelta. Luego tuvo tráfico en la forma de Pierre Gasly en su última oportunidad de marcar un giro lanzado.

“Fue una de esas cosas, él [Pierre Gasly] decidió hacer su vuelta antes de tiempo, y yo empecé mi vuelta demasiado cerca, pero no debería ser la diferencia entre pasar a la Q2 o no, realmente deberíamos llegar en la primera vuelta, es algo en lo que tengo que ponerme las pilas”, dijo bastante decepcionado el neozelandés.
Aunque afirmó en repetidas ocasiones que el RB21 tiene “una ventana muy pequeña”, insistió en que la dificultad que estaba teniendo no era la “preparación de los neumáticos” en sí, el proceso a menudo complicado de conseguir que la sensible goma de Pirelli alcance la temperatura de funcionamiento adecuada sin exigirle demasiado.
Eso no quiere decir que la gestión de los neumáticos no sea un problema, porque en la clasificación al sprint, cuando estaba con los medios en lugar de los blandos, atribuyó su fracaso en mejorar en su segunda tanda a no enfriar lo suficiente el mismo compuesto mientras permanecía en pista entre vueltas, pero la SQ1 fue una sesión mucho más corta que la Q1, por lo que el plan era muy diferente, al igual que la cantidad de tráfico en un momento dado.
Liam Lawson parecía estar cometiendo un error similar al de los anteriores compañeros de equipo de Max Verstappen, apurar demasiado el coche creyendo que eso es lo que se necesita, ya que el holandés parece estar yendo a fondo. Eso es muy evidente en el circuito de Shanghai, donde el exceso de compromiso en la entrada a las dos primeras curvas, esencialmente una larga de radio cada vez más cerrado, pone el neumático delantero izquierdo bajo extrema presión.
Si el coche comienza a subvirar, como le ocurrió con frecuencia durante los entrenamientos y la clasificación, puede acabar con la vuelta, y el proceso de persuadir al tren delantero para que vuelva a atacar y acelerar puede dañar los compuestos traseros: “Son las características del coche, la forma en que se conduce. Si Max [Verstappen] es capaz de pilotarlo, yo también debería ser capaz de hacerlo”.

“Es una ventana [de funcionamiento] muy pequeña. Es difícil, es complicado de pilotar, para conseguir que en esa ventana. Me gustaría decir que con el tiempo eso vendrá, pero no tengo tiempo para hacer eso, es algo que tengo que conseguir en la parte superior “, señaló un Liam Lawson que mira al tiempo como su principal enemigo, o amigo.
La cuestión del tiempo es pertinente, por dos razones. Sin duda, su relativa falta de experiencia a este nivel le pone en desventaja, al igual que los problemas técnicos que le hicieron perder mucho en pista en las pruebas invernales y le dejaron fuera de la FP3 en el Gran Premio de Australia. En el Gran Premio de China, al ser un fin de semana con formato al sprint, solo hubo una sesión de entrenamientos.
A su favor, no utilizó eso o su falta de experiencia previa en los circuitos de Melbourne y Shanghai como excusa: “Lo hace más difícil, pero no debería ser la diferencia entre clasificarme donde lo he hecho”.
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El otro factor que hace que el tiempo sea importante es la falta de paciencia institucional de Red Bull con los pilotos que no dan la talla. Cuando nuestros compañeros le plantearon a Helmut Marko que el neozelandés reconocía que necesitaba tiempo, pero que no lo tenía, la respuesta del austriaco fue inequívoca: “Tiene razón”.
Liam Lawson tiene un improbable aliado en la forma de su propio compañero de equipo, que está de acuerdo en que el RB21 es difícil de conducir y a menudo no es lo suficientemente rápido. El director técnico del conjunto, Pierre Wache, dijo que dejaron de buscar el rendimiento puro para hacer el coche más equilibrado en 2025, y parece que solo tuvieron éxito en uno de esos objetivos.
En un mensaje no muy codificado a su propio equipo, Max Verstappen destacó el rendimiento relativo de Racing Bulls.

“Si nos fijamos en Liam [Lawson] en Racing Bulls, en realidad era bastante similar a Yuki [en ritmo]”, dijo a los medios neerlandeses después de la clasificación. “No había mucha diferencia entre ellos, pensé. De lo contrario, el equipo no tomaría esa decisión de poner a Liam [en Red Bull], y ahora, de repente, esa diferencia es muy grande y además están muy cerca de mí, así que eso te dice algo, si pusieran a Liam en los Racing Bull, iría más rápido”.
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En este artículo
Stuart Codling
Fórmula 1
Liam Lawson
Red Bull Racing
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